En la pampa bonaerense, un reciente hallazgo arqueológico ha dejado perplejos a los expertos. En un área de tan solo cinco metros cuadrados, se han descubierto pipas francesas de arcilla, objetos que hasta el momento solo habían sido encontrados en grandes urbes. Este descubrimiento tuvo lugar en la antigua pulpería “De la Loma Partida”, un establecimiento que operó desde la época de Juan Manuel de Rosas y que servía como punto de paso para carretas que transitaban entre Buenos Aires y Tandil.
La pulpería, construida sobre un paso de toscas del arroyo Langueyú, abastecía a trabajadores rurales, soldados y comerciantes. Los hermanos Vela, sus dueños originales, se establecieron en la región tras emigrar desde la Banda Oriental. Además de ofrecer vino, caña y aguardiente, el establecimiento vendía tabaco, yerba, azúcar y telas. Su importancia fue notable hasta la llegada del Ferrocarril del Sud en 1891, evento que marcó su declive.
Detalles del hallazgo arqueológico
El equipo liderado por Facundo Gómez Romero logró recuperar 305 fragmentos de pipas de caolín, incluyendo cazoletas enteras y otras partes. Cada una de estas pipas presenta grabada la marca “L Fiolet – St Omer”, perteneciente a una fábrica del norte de Francia activa desde 1761. Este hallazgo es considerado único ya que en otros sitios arqueológicos rurales se han encontrado únicamente dos o tres pipas similares, lo que sugiere un uso intensivo y cotidiano en la pulpería.
Las pipas encontradas son largas y rectas, con una longitud aproximada de 20 centímetros. Eran económicas y estaban destinadas principalmente a las clases populares, marineros y esclavos. Gómez Romero indica que es probable que su uso haya sido más común entre los vascos que entre los criollos, quienes preferían el cigarro.
Otros hallazgos significativos
Aparte de las pipas, también se encontraron botellas y loza inglesa de uso diario. Estos elementos refuerzan la idea de que la pulpería funcionaba como un importante centro de abastecimiento en la región pampeana.
A raíz de este descubrimiento, se proyecta la creación de un museo donde se exhibirán los materiales excavados. Asimismo, los investigadores están analizando restos de cazoletas para identificar las sustancias contenidas en ellas, incluyendo tabaco y otro elemento aún no determinado.
Las excavaciones contaron con el apoyo activo de la comunidad local y diversas entidades, además de involucrar a estudiantes y especialistas en arqueología e historia.