El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, realizó declaraciones este miércoles respecto al reciente «bloqueo naval» que se ha impuesto a la salida y entrada de buques petroleros en Venezuela. En su intervención ante los medios, Trump aseguró que no permitirá el paso de «nadie que no deba pasar».
«No dejaremos pasar a nadie que no deba pasar», enfatizó el mandatario, quien acusó al gobierno venezolano de haber despojado a Estados Unidos de todos sus «derechos energéticos». Según Trump, «nos quitaron todo nuestro petróleo hace no mucho tiempo. Y lo queremos de vuelta. Pero nos lo quitaron. Nos lo quitaron ilegalmente», aseveró.
Acciones del Gobierno estadounidense
El presidente Trump ordenó el martes un «bloqueo total y completo» sobre los buques petroleros sancionados que intenten entrar o salir de Venezuela. Además, acusó a Caracas, sin presentar pruebas concretas, de utilizar «el petróleo de yacimientos robados para financiarse a sí mismo», así como de estar involucrado en actividades relacionadas con el terrorismo, el tráfico de personas, asesinatos y secuestros.
En respuesta a estas acciones, el gobierno venezolano denunció la «amenaza temeraria» del presidente estadounidense, argumentando que esta medida «viola el derecho internacional, el libre comercio y la libre navegabilidad». Asimismo, aseguraron que continuarán con sus exportaciones de crudo a pesar del bloqueo.
Contexto regional y reacciones internacionales
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Despliegue militar: Desde agosto pasado, Estados Unidos ha mantenido una considerable fuerza militar frente a las costas venezolanas bajo la justificación de luchar contra el narcotráfico. Washington anunció posteriormente la operación Lanza del Sur, cuyo objetivo oficial es eliminar a los narcoterroristas en el hemisferio occidental y proteger a EE.UU. «de las drogas que están matando» a sus ciudadanos.
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Operativos letales: Como parte de estas operaciones se han llevado a cabo bombardeos contra embarcaciones presuntamente vinculadas al narcotráfico en el Caribe y Pacífico, resultando en más de 80 muertes sin evidencia concreta sobre su implicación en actividades ilícitas.
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Asalto a buque petrolero: En una escalada de las acciones violentas por parte de EE.UU., militares estadounidenses asaltaron un buque petrolero en aguas venezolanas. Este hecho fue calificado por Caracas como un «robo descarado» y un «acto de piratería internacional». El presidente Nicolás Maduro condenó la situación como un «acto absolutamente criminal e ilegal».
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Acusaciones infundadas: Washington ha acusado al mandatario venezolano sin presentar evidencias concretas, duplicando la recompensa por su captura al considerarlo líder de un cártel del narcotráfico.
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Punto de vista venezolano: Maduro ha denunciado que el verdadero objetivo de EE.UU. es llevar a cabo un «cambio de régimen», buscando apoderarse de las vastas riquezas petroleras y gasíferas del país. «Se les cayó la máscara; el narcotráfico es ‘fake news’: es el petróleo, que se lo quieren robar,» expresó tras el asalto al tanquero.
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Aclaraciones sobre narcotráfico: La ONU y la DEA han afirmado que Venezuela no representa una ruta principal para el tráfico hacia Estados Unidos, ya que más del 80% de las drogas utilizan rutas por el Pacífico.
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Censura internacional: Diversos actores internacionales han condenado las acciones estadounidenses. Rusia y organismos como la ONU han expresado su preocupación por las violaciones al derecho internacional cometidas durante estos operativos militares.
Dichas situaciones continúan generando tensiones entre ambos países mientras se desarrollan los acontecimientos en la región caribeña.
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