En un cambio significativo que redefine la política económica en Argentina, los analistas privados consultados por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) han proyectado que la inflación se mantendrá por debajo del 2% mensual durante el resto del año 2025. Esta notable previsión, obtenida del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) de junio, respalda el éxito del plan de estabilización liderado por el presidente Javier Milei.
Según el informe, se anticipa una inflación de 1,8% para junio, lo que representa una disminución de una décima respecto a la medición anterior. Las proyecciones para el segundo semestre indican una continua desaceleración inflacionaria: julio (1,7%), agosto (1,6%), septiembre (1,7%), octubre (1,7%), noviembre (1,5%) y diciembre (1,7%). Si estas estimaciones se materializan, la inflación anual podría cerrar en torno al 27%, lo que significaría un descenso de 1,6 puntos porcentuales en comparación con las previsiones previas.
Un contexto económico transformador
Este dato adquiere mayor relevancia si se considera que hace apenas siete meses Argentina enfrentaba una hiperinflación inminente con niveles mensuales cercanos al 30%. Con la implementación de un ajuste fiscal severo, reducción del gasto público y disciplina monetaria, Milei ha alcanzado un logro que parecía inalcanzable.
Los analistas también prevén una mejora continua para 2026: aunque el informe no detalla mes a mes las expectativas, estima una inflación interanual del 20,8% para los próximos doce meses. Esto sugiere una disminución significativa en la dinámica de precios y consolida un panorama de estabilidad económica.
Dólar y tipo de cambio: proyecciones estables
Otro aspecto relevante del REM es la previsión sobre el tipo de cambio. En este caso, las estimaciones se centran en el tipo de cambio mayorista. Tras el levantamiento gradual del cepo cambiario y el fin del esquema de crawling peg, se espera un deslizamiento moderado del dólar.
Para julio, se anticipa que el tipo de cambio mayorista alcance los $1.207, lo que implica un aumento de $25,5 respecto al REM anterior. Sin embargo, este valor sigue siendo inferior al cierre del mercado minorista, que fue de $1.260. Para diciembre, se estima que alcanzará cifras superiores a las previstas anteriormente. Esto indica estabilidad en el ámbito cambiario y confianza en la política monetaria implementada.
Crecimiento económico y expectativas positivas
El Relevamiento también refleja un cambio positivo en relación a la actividad económica. Los expertos han ajustado al alza sus proyecciones para el segundo trimestre de 2025: ahora estiman un crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) del 0,4% trimestral desestacionalizado, dos décimas más que en la medición previa. Además, prevén un avance del 0,7% en el tercer trimestre y del 0,6% en el cuarto trimestre, consolidando así una recuperación gradual.
A nivel anual, el REM proyecta un crecimiento del 5% en 2025 comparado con 2024. Aunque esta cifra es 0,2 puntos inferior a la medición anterior, sigue siendo un dato claramente positivo para un país que ha atravesado años de estancamiento.
Tendencias en depósitos y tasas de interés
En cuanto al rendimiento de los depósitos a plazo fijo mayoristas, se espera una disminución gradual acorde con la reducción de la inflación. Según los analistas, la tasa nominal anual promedio será del 33% en julio, y disminuirá lentamente hasta alcanzar aproximadamente el 27,99% en diciembre. Para junio de 2026, se prevé que esté alrededor del 24,24%. Este descenso indica que el Banco Central no necesitará recurrir a tasas prohibitivas para controlar los precios, lo cual es señal de una macroeconomía más equilibrada.
La noticia en cifras
Concepto |
Cifra |
Inflación proyectada para junio 2025 |
1.8% |
Inflación proyectada para diciembre 2025 |
27% |
Crecimiento del PBI proyectado para 2025 |
5% |
Tasa nominal anual promedio en julio 2025 |
33% |