Los altos mandos militares de Estados Unidos han afirmado que no se ha descartado ninguna opción, incluidas las armas nucleares tácticas, para atacar y destruir la instalación nuclear subterránea de Irán ubicada en Fordo. Esta información fue proporcionada por la corresponsal de Fox News, Jacqui Heinrich.
En declaraciones de un funcionario de la Casa Blanca, se indicó que los círculos militares estadounidenses están convencidos de la efectividad de sus bombas antibúnker para llevar a cabo un ataque exitoso en Fordo. A diferencia de Israel, Estados Unidos cuenta con una bomba de 13,600 kilos que podría penetrar y dañar significativamente esta instalación, construida en el interior de una montaña.
Consideraciones sobre el uso de armas nucleares
A pesar de la capacidad técnica del arsenal estadounidense, el presidente Donald Trump ha expresado dudas sobre si las bombas conocidas como Penetrador de Munición Masiva (MOP) serían efectivas para destruir dicha infraestructura nuclear. Estas inquietudes han llevado a cuestionamientos sobre la certeza del éxito de una operación militar en este contexto. La resolución a estas dudas técnicas podría ser crucial para determinar el curso de acción que tomará la Casa Blanca en las próximas horas.
Recientemente, informes periodísticos sugieren que Washington podría colaborar con Israel para destruir la instalación de enriquecimiento de uranio en Fordo mediante el uso del potente proyectil conocido como GBU-57, también denominado 'padre de todas las bombas'. Esta bomba, guiada por GPS, es considerada la mayor no nuclear del arsenal estadounidense y puede ser lanzada por el bombardero furtivo B-2 Spirit.
Desafíos y consecuencias internacionales
No obstante, incluso si se autoriza a los bombarderos B-2 a realizar este ataque, existen múltiples obstáculos técnicos para coordinar tal operación con Israel. Además, el empleo de esta arma antibúnker podría tener graves repercusiones internacionales debido al riesgo de contaminación nuclear, lo cual pondría en peligro a la población civil.
Por su parte, el general Mohsen Rezaei, alto oficial de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), ha declarado que las instalaciones nucleares iraníes permanecen intactas y que los ataques israelíes no han tenido resultados significativos. También afirmó que todos los materiales enriquecidos han sido trasladados a lugares seguros dentro del país persa.
Rezaei enfatizó que aunque Estados Unidos podría causar daños a la instalación subterránea en Fordo, su capacidad para fortalecer las defensas israelíes es limitada.
Más información estará disponible próximamente.