El físico estadounidense Richard Lawrence Garwin, reconocido como uno de los creadores de la primera bomba de hidrógeno en Estados Unidos, ha fallecido a la avanzada edad de 97 años, según lo reporta The New York Times.
Garwin diseñó la primera bomba termonuclear del mundo a la temprana edad de 23 años. A lo largo de su vida profesional, se desempeñó como asesor científico para varios presidentes y participó en el diseño de armamento para el Pentágono, así como en sistemas avanzados de reconocimiento por satélite.
Reflexiones sobre su legado
A pesar de sus contribuciones significativas al desarrollo militar, Garwin no consideraba la creación de la bomba como su mayor logro. En una entrevista realizada en 1984, expresó: «Nunca sentí que construir la bomba de hidrógeno fuera lo más importante del mundo, ni siquiera de mi vida en aquel momento». Además, agregó que sería preferible un mundo sin estas armas, aunque reconocía que su existencia podía servir como elemento disuasorio.
Ferviente defensor del control de armamentos y del desarme nuclear, Garwin se opuso públicamente al desarrollo de nuevas armas. En 2021, fue uno de los 700 científicos que firmaron una petición dirigida al entonces presidente Joe Biden, instando a que Estados Unidos se comprometiera a no ser el primero en utilizar armas nucleares.