Donald Trump se reunió en la Casa Blanca con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, en un contexto de creciente preocupación en Europa por la próxima cumbre en Budapest. Esta reunión sigue a una llamada entre Trump y el presidente ruso Vladímir Putin, donde discutieron la posibilidad de abordar conflictos actuales. La visita de Rutte es clave para fortalecer los lazos transatlánticos ante los desafíos geopolíticos. A pesar de rumores sobre la posible suspensión de la cumbre, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, aseguró que los preparativos siguen adelante. Para más detalles, visita el enlace.
Reunión entre Trump y el secretario general de la OTAN
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llevó a cabo una reunión este miércoles en la Casa Blanca con Mark Rutte, secretario general de la OTAN. Este encuentro se produce en un contexto de creciente preocupación en Europa ante la inminente cumbre que se celebrará en Budapest.
Dicha visita de Rutte a Estados Unidos ocurre pocos días después de una llamada telefónica entre Trump y su homólogo ruso, Vladímir Putin. En esta conversación, ambos líderes acordaron llevar a cabo otra cumbre en la capital húngara con el objetivo de buscar soluciones al conflicto actual.
Desarrollo de las relaciones diplomáticas
Al día siguiente, el 17 de octubre, Trump recibió en Washington al presidente de Ucrania, Vladímir Zelenski. La reunión concluyó sin alcanzar un acuerdo sobre los solicitados misiles de crucero Tomahawk por parte del gobierno ucraniano. Durante el encuentro, el mandatario estadounidense instó a poner fin a las hostilidades en la línea actual de combate.
Aún no se ha establecido una fecha para lo que sería el segundo encuentro cara a cara entre los presidentes de Rusia y Estados Unidos desde que Trump regresó a la Casa Blanca. A pesar de los rumores sobre una posible suspensión de la cumbre, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, confirmó este miércoles que los preparativos para el evento «continúan».
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