La reciente separación entre Laurita Fernández y Peluca Brusca ha captado la atención del público, especialmente tras la revelación del nombre del supuesto tercero en discordia. Esta información fue divulgada por el periodista Pepe Ochoa durante su participación en el programa LAM, donde ofreció detalles sobre el conflicto que llevó al término de esta relación.
Ochoa afirmó que un individuo, cuya identidad se mantuvo oculta por un tiempo, fue el causante de la ruptura. Según sus declaraciones, “hay una persona que fue suspendida por Peluca porque sabía que tuvo relaciones con Laurita”, lo que generó un escándalo en el entorno cercano a la pareja.
Detalles del conflicto revelados en LAM
En la emisión del miércoles, Ochoa explicó que este tercero en discordia es parte del equipo de producción del programa Bienvenidos a ganar, donde trabaja Laurita. El periodista mencionó que este joven, identificado como ‘E’, había tenido un romance con otra figura pública, aunque no era Laurita. Sin embargo, surgieron sospechas cuando ella comenzó a notar actitudes extrañas.
“Este chico tenía un affaire con otra famosa, pero ella empezó a sospechar que él también estaba involucrado con Laurita”, detalló Ochoa. La situación se tornó más complicada cuando la famosa notó que ambos desaparecían al mismo tiempo y no respondían a las llamadas telefónicas.
Identidad del tercero en discordia
Finalmente, después de mantener la intriga durante varios minutos, se dio a conocer el nombre del presunto amante de Laurita: Emiliano, quien trabaja como azafato en su programa y anteriormente estuvo en una relación con Coki Ramírez.
El escándalo ha generado una serie de repercusiones emocionales dentro del equipo de trabajo. Emiliano habría engañado a Coki con Laurita, lo cual culminó en la suspensión del joven por parte de Peluca Brusca, quien decidió poner fin a su relación con la conductora debido a esta situación.
Un triángulo amoroso complicado
A medida que se desentrañan los detalles de este triángulo amoroso, queda claro que las implicaciones han afectado no solo a las personas directamente involucradas, sino también al ambiente laboral. Este episodio resalta cómo las relaciones personales pueden influir en el ámbito profesional y viceversa.