El periodista Seymour Hersh, galardonado con el premio Pulitzer, afirmó durante una charla en el Club Nacional de Prensa en Washington DC que Joe Biden decidió atacar los oleoductos Nord Stream de Rusia porque creía que ser un presidente belicoso le daría mayores posibilidades de ser reelegido.
El informe publicado por Hersh el mes pasado afirmó que Estados Unidos destruyó los oleoductos como parte de una operación encubierta.
De acuerdo con las fuentes de Hersh, unos buzos de la Marina de los Estados Unidos colocaron explosivos en junio del año 2022 durante el ejercicio BALTOPS 22 de la OTAN. Posteriormente, estos explosivos fueron detonados tres meses después mediante una señal remota enviada por una boya de sonar.
Según una fuente citada por Hersh, los conspiradores eran conscientes de que la operación encubierta era considerada como un "acto de guerra". A pesar de esto, algunos miembros de la CIA y del Departamento de Estado advirtieron sobre las consecuencias políticas negativas si la operación se hacía pública.
Según el New York Times, la semana pasada se informó que un "grupo pro-ucraniano" fue responsable de sabotear los oleoductos. Contradiciendo las suposiciones anteriores, el equipo involucrado en la misión constaba de solo seis personas y no se creía que solo un estado tuviera los recursos para llevar a cabo dicha operación.
De acuerdo con Hersh, hablando de Biden, "Lo hizo. Lo hizo, te lo digo, lo hizo", y también dijo que "El juego de Biden es esperar y nunca decir que sí".
El periodista declaró que la intención de Biden era aumentar el conflicto para establecerse como un líder de guerra.
Según la cita, se cree que Biden también considera que atacar a Rusia sería beneficioso para su carrera política, ya que históricamente los presidentes han obtenido éxito político durante las guerras. Además, se menciona el ejemplo de Jack Kennedy como un caso clásico.
Según Hersh, en enero de 2022, Biden decidió explorar la posibilidad de "volar... esos oleoductos y devolver [a los rusos] a la edad oscura".
El ganador del premio Pulitzer criticó duramente a los medios tradicionales por no haber seguido su informe que señalaba a Estados Unidos como responsable del ataque que destruyó tres de los cuatro oleoductos.
China ha mostrado dudas ante la explicación de que un grupo pro-ucraniano fue el causante de las explosiones.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Wang Wenbin, solicitó una investigación objetiva, imparcial y profesional sobre el atentado durante una conferencia de prensa.
Wang ha notado que algunos medios occidentales han estado en silencio después de que Hersh informara que Estados Unidos estaba detrás de la explosión de Nord Stream. Sin embargo, ahora estos mismos medios están hablando al mismo tiempo. Wang se pregunta si hay algo detrás de esta situación y si Estados Unidos tiene alguna explicación para ello.
Según nuevos informes, se ha revelado que un barco espía alemán estaba presente en la zona donde ocurrió el ataque con explosiones el 26 de septiembre.
De acuerdo con un reporte de la revista Der Spiegel de Alemania, la CIA notificó a Berlín sobre una eventual amenaza de ataque a los gasoductos en el Mar Báltico algunas semanas antes de que se llevara a cabo.
El presidente ruso, Vladimir Putin, desestimó las acusaciones de que activistas pro-ucranianos estuvieran detrás del ataque al oleoducto Nord Stream y las calificó de "tonterías". Según Putin, es más probable que el ataque haya sido llevado a cabo por un poder estatal. Esto fue informado ayer.