En un movimiento estratégico para contrarrestar las crecientes amenazas provenientes de China, Taiwán ha presentado una serie de avanzados sistemas de misiles, que incluyen el sistema de misiles anti-balísticos Chiang Kung y el nuevo misil hipersónico Chiang-Kong. Estas innovaciones son parte del esfuerzo de modernización militar que busca disuadir cualquier agresión por parte de Beijing, que considera a la isla como parte de su territorio y ha declarado su intención de tomarla por la fuerza si es necesario.
El Instituto Nacional Chung-Shan de Ciencia y Tecnología (NCSIST) de Taiwán lanzó oficialmente el sistema Chiang Kung, también conocido como Strong Bow, durante la exposición bienal de tecnología aeroespacial y defensa en Taipéi. Este sistema cuenta con un interceptor de dos etapas y un radar AESA (matriz activa escaneada electrónicamente) producido localmente, diseñado para interceptar misiles balísticos tácticos enemigos a altitudes medias.
Desarrollo de capacidades defensivas
Li Shih-Chiang, presidente del NCSIST, indicó que el interceptor Chiang Kung puede alcanzar objetivos a altitudes superiores a 70 kilómetros. Esta capacidad es comparable al sistema Arrow 2 de Israel, que también tiene capacidad de intercepción exoatmosférica. El diseño de dos etapas del Chiang Kung, construido con materiales compuestos y con capacidad de vectorización del empuje, le permite ajustar su trayectoria para impactar objetivos con precisión.
La introducción del Chiang Kung agrega una capa valiosa a los sistemas existentes de defensa misilística en Taiwán, que incluyen el Tien Kung III (Sky Bow III) desarrollado localmente y los sistemas Patriot fabricados en Estados Unidos. Estos sistemas buscan crear una red defensiva multicapa frente al creciente arsenal de misiles balísticos del Ejército Popular de Liberación (PLA) chino.
En este contexto, se destaca que el sistema hipersónico Chiang-Kong también ha sido presentado. Este interceptor está diseñado para enfrentar misiles crucero y balísticos volando a altitudes cercanas al espacio exterior. Con velocidades superiores a Mach 5, el sistema utiliza un vehículo lanzador y un vehículo destructivo que permite ajustes en su trayectoria durante la fase terminal, aumentando así las probabilidades de intercepción.
Colaboración internacional y aumento del gasto militar
Taiwán también ha revelado un prototipo de misil crucero desarrollado en colaboración con Anduril Industries, una empresa contratista estadounidense. Adaptado del Barracuda-500, este nuevo misil terrestre está destinado a atacar objetivos tanto marítimos como terrestres. Li anunció que la producción se llevará a cabo en la isla, estableciendo una línea de fabricación en los próximos 18 meses.
Esta cooperación subraya los profundos lazos defensivos entre Taiwán y Estados Unidos. En medio del creciente apoyo internacional hacia Taiwán, el presidente Lai Ching-te ha declarado su intención de aumentar el gasto militar hasta alcanzar el cinco por ciento del PIB antes del año 2030. Esta decisión refleja un compromiso firme con la preparación militar y forma parte de una estrategia más amplia que incluye la desvinculación económica estratégica respecto a Beijing.
A medida que las tensiones continúan aumentando en la región, el mundo observa con preocupación las advertencias emitidas por Pekín contra cualquier interferencia militar externa y su determinación por evitar intentos independentistas en Taiwán. La presentación reciente de estos nuevos sistemas misilísticos es un claro indicativo del compromiso taiwanés por defender su soberanía ante las crecientes amenazas.
La noticia en cifras
Cifra |
Descripción |
43 millas (70 kilómetros) |
Altitud mínima a la que el interceptor Chiang Kung puede comprometer objetivos. |
230,000 pies (aproximadamente 70 kilómetros o 40 millas) |
Altitud máxima a la que el sistema de misiles hipersónicos Chiang-Kong puede operar. |
5% |
Porcentaje del PIB al que Taiwán planea aumentar su gasto militar para 2030. |