Un estudio reciente realizado en Estados Unidos ha revelado que el gabapentín, un medicamento comúnmente prescrito para el tratamiento del dolor crónico, podría aumentar el riesgo de desarrollar dementia hasta en un 40%. Este hallazgo plantea serias interrogantes sobre la seguridad de los tratamientos farmacéuticos actuales.
La investigación, llevada a cabo por expertos de Case Western Reserve University, analizó los registros médicos de más de 26,000 estadounidenses que recibieron tratamiento por dolor lumbar crónico entre 2004 y 2024. Los resultados, publicados en la revista Regional Anesthesia & Pain Medicine, revelan una tendencia alarmante: los pacientes que recibieron gabapentín seis o más veces presentaron un riesgo de demencia un 29% mayor, cifra que se elevó al 40% para aquellos con doce o más recetas. Además, los adultos jóvenes de entre 35 y 49 años vieron su riesgo más que duplicado, lo cual es preocupante dado que este fármaco es comercializado como «seguro».
Mecanismos del gabapentín en el cerebro
El gabapentín, conocido comercialmente como Neurontin y producido por Pfizer, actúa alterando la gamma-aminobutírico (GABA), un neurotransmisor crucial que regula la actividad neuronal. Sin embargo, esta supresión de la actividad cerebral podría tener consecuencias devastadoras.
Los investigadores advirtieron: «Nuestros hallazgos indican una asociación entre la prescripción de gabapentín y la demencia o deterioro cognitivo dentro de un periodo de diez años». Hicieron un llamado a realizar un seguimiento cercano a los pacientes adultos a quienes se les prescribe este medicamento para evaluar posibles declives cognitivos.
A pesar del tamaño significativo de la muestra del estudio, algunos críticos han señalado que únicamente se establece una correlación y no una causalidad. La doctora Leah Mursaleen, de Alzheimer’s Research UK, comentó: «Este estudio solo muestra una asociación entre las prescripciones de gabapentín y el deterioro cognitivo leve o la demencia; por lo tanto, no sabemos si el medicamento está causando directamente el mayor riesgo». Sin embargo, esta no es la primera vez que el sector médico ignora señales de advertencia hasta que las consecuencias son irreversibles.
Una generación afectada por las recetas médicas
Los datos más preocupantes del estudio se relacionan con pacientes menores de 65 años. Entre aquellos con edades comprendidas entre los 35 y 49 años, el riesgo de demencia se más que duplicó, mientras que el deterioro cognitivo leve (MCI), considerado precursor de la demencia, se triplicó. Con aproximadamente ocho millones de recetas anuales en Estados Unidos y casi un millón en Inglaterra, las implicaciones son graves.
Expertos independientes intentaron desviar la responsabilidad. La profesora Tara Spires-Jones sugirió que los pacientes con dolor crónico podrían ser simplemente «menos activos físicamente», lo cual es un conocido factor de riesgo para la demencia. No obstante, esta explicación ignora las propiedades neuroactivas del fármaco y el historial perjudicial de Big Pharma en busca del lucro.
Estrategias predecibles: Negar, desviar y lucrar
El gabapentín fue aprobado en la década de 1990 para tratar epilepsia y dolor neuropático; sin embargo, su uso fuera de etiqueta ha crecido exponencialmente. En medio del aumento global en los casos de demencia, las conexiones son innegables.
Investigaciones recientes publicadas en The Lancet identificaron catorce factores modificables relacionados con el riesgo de demencia, incluyendo colesterol alto y pérdida visual; sin embargo, los medicamentos recetados estaban notablemente ausentes. ¿Por qué? Admitir daños iatrogénicos pondría al descubierto el compromiso moral del sistema médico contemporáneo.
En el Reino Unido, se emitieron 799,155 recetas para gabapentín durante el año fiscal 2023/24, una ligera disminución respecto a las 926,071 del año anterior. Sin embargo, con la enfermedad de Alzheimer convirtiéndose en la principal causa de muerte en ese país, surge la pregunta: ¿cuántas vidas han sido sacrificadas por avaricia corporativa?
Este estudio representa una llamada urgente no solo sobre el gabapentín sino sobre todos los medicamentos sintéticos presentados como «seguros» hasta demostrar lo contrario. A medida que se proyecta que los casos de demencia alcancen 1.7 millones en el Reino Unido dentro de dos décadas, es momento de cuestionar la confianza ciega en instituciones corruptas. Modalidades naturales para sanar, desde dietas antiinflamatorias hasta cannabinoides, ofrecen alternativas más seguras sin poner en riesgo nuestra agudeza mental.
Fuentes para este artículo incluyen:
DailyMail.co.uk
Newsweek.com
MedicalXpress.com
La noticia en cifras
Cifra |
Descripción |
40% |
Aumento del riesgo de demencia al tomar gabapentin a largo plazo. |
29% |
Aumento del riesgo de demencia para pacientes que recibieron gabapentin seis o más veces. |
2x |
Aumento del riesgo de demencia para adultos jóvenes (35 a 49 años) que toman gabapentin a largo plazo. |
12+ |
Número de prescripciones de gabapentin que incrementa el riesgo de demencia hasta un 40%. |