Desde 2017, el estado de California ha gastado 4 millones de dólares en impuestos en tratamientos para personas transgénero, como cambios de sexo y cirugía estética, para los presos. Los contribuyentes han extendido la alfombra roja para los reclusos al derrochar en costosas cirugías estéticas, que alguna vez fueron exclusivas de las élites de Hollywood.
En un informe del Washington Free Beacon se reveló que los presos condenados a muerte en California han sido sometidos a costosas cirugías transgénero, incluso financiadas por los residentes de dicho estado. Según el medio, desde que California se convirtió en el primer estado en ofrecer pagar los cambios de sexo de los presos, se han destinado millones de dólares a cirugías y procedimientos para 157 reclusos.
Según los documentos obtenidos por Free Beacon, cuatro de los reclusos se encontraban en el corredor de la muerte. Durante el periodo comprendido entre 2017 y julio de 2023, el estado invirtió 2,5 millones de dólares en vaginoplastias para 35 reclusos masculinos. "La vaginoplastia es una intervención quirúrgica destinada a crear una vagina", afirma Johns Hopkins Medicine. "Esta operación implica la extirpación del pene, los testículos y el escroto".
"Reorganizar el tejido de la zona genital para crear un canal vaginal es lo que implica la vaginoplastia", según se explica. Sin embargo, es científicamente imposible que esta cirugía convierta a un hombre en una mujer. Además, se informa que otros 11 prisioneros varones recibieron implantes mamarios, con un costo total de más de 180.000 dólares para los contribuyentes. También se menciona que dos hombres en el sistema penitenciario se sometieron a "cirugías de feminización facial", generando un gasto total de $184,141.
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