El apagón ocurrido el 28 de abril, que afectó a España y Portugal, ha sido calificado como un evento con un origen multifactorial. La vicepresidenta Tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen, explicó que la causa principal fue un fenómeno de sobretensiones en la red eléctrica, lo que desencadenó una reacción en cadena.
Durante una conferencia de prensa celebrada en La Moncloa, Aagesen presentó tres factores clave que contribuyeron a esta crisis. En primer lugar, destacó la insuficiencia en los grupos de generación, señalando que el sistema carecía de la capacidad necesaria para controlar adecuadamente la tensión dinámica.
Factores Desencadenantes del Apagón
A continuación, la vicepresidenta mencionó que las oscilaciones condicionaron el sistema, haciendo énfasis en dos oscilaciones específicas: una atípica y otra habitual. A pesar de los esfuerzos realizados por los expertos para contener estas oscilaciones, estas llevaron al sistema a un estado de mayores tensiones.
Finalmente, Aagesen detalló que se produjeron desconexiones de generación en una fase inicial del evento. Algunas de estas desconexiones fueron calificadas como «aparentemente indebidas», lo que contribuyó a incrementar la tensión en el sistema eléctrico.
Recomendaciones Posteriores a la Crisis
En el informe elaborado por el comité encargado de analizar la crisis eléctrica, se recomendó implementar diversas medidas técnicas destinadas a reforzar las capacidades para el control de tensión y proteger el sistema contra futuras oscilaciones. Estas recomendaciones son parte de un esfuerzo más amplio por mejorar la infraestructura eléctrica y prevenir incidentes similares en el futuro.
Para más información sobre este tema, se puede consultar el informe completo disponible aquí.