La masonería española respaldó en su XXXV Asamblea, celebrada el 12 de marzo en Madrid, la “búsqueda de equilibrio”, la “comprensión tolerante” y el “respeto a los poderes civiles legítimos”, en una resolución que medios cercanos a la Cumbre masónica calificaron a mil21.es de apuesta por un Gobierno de coalición que supere el enfrentamiento partidista y la inestabilidad política. Con la presencia de 34 organizaciones masónicas internacionales, la Gran Logia de España (GLE) expresó su “gratitud por los valores de entendimiento fraterno que desde 1978 han amparado y protegido la existencia ininterrumpida de la Masonería en España”.
La Asamblea de la Gran Logia de España (GLE), presidida el Gran Maestre Óscar Alfonso Ortega, aprobó una resolución en la que con un lenguaje críptico la masonería española se muestra favorable a un Gobierno de coalición que supere el enfrentamiento partidista y la inestabilidad política antes de llegar a la solución extrema de repetir las elecciones generales el próximo mes de junio. Aunque el documento subraya que “la masonería prohíbe en su seno toda discusión política o religiosa”, recoge que en 2016 la sociedad española, “de la que formamos parte”, afronta “la búsqueda del equilibrio fraterno tras la renovación reciente de su pluralidad”, en alusión a las elecciones generales del pasado 20 de diciembre en las que la “pluralidad” se ha visto fortalecida por la comparecencia de dos nuevos partidos políticos: Ciudadanos y Podemos.
La Gran Logia de España, partidaria de la “búsqueda del equilibrio tras la renovación reciente de la pluralidad”, en alusión al 20-D
La resolución de la
XXXV Asamblea, celebrada en Madrid el 12 de marzo, aboga por la “comprensión tolerante y una fructífera armonía entre las personas, que no deben permanecer extrañas las unas de las otras”, dando a entender, según interpretan a mil21.es medios cercanos a la Cumbre masónica, que el enfrentamiento partidista del reciente debate de investidura representa todo lo contrario al diálogo y la negociación.
Gratitud hacia la sociedad españolaLa Gran Logia de España subraya su respeto a los “poderes civiles legítimos y a las opiniones ajenas” que obligan a los masones a que “nos comportemos siempre, ante cualquier situación, como leales ciudadanos, amigos de la paz, sometiéndonos de buena gana a las leyes del país donde residimos”. La Asamblea expresó, asimismo, su gratitud hacia la sociedad española “por los valores de entendimiento fraterno que desde 1978 han amparado y protegido la existencia ininterrumpida de la Masonería en España”, y renovaron su “acatamiento a la Constitución Española y a cuantas Instituciones emanen de ella”.
Compás de espera masónicoAnte el escenario de inestabilidad política -el mayor vivido desde el inicio de la Transición democrática hace 40 años-, con la negativa del presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, de dejar paso a un dirigente del PP que desbloquee la negociación a tres bandas con PSOE y Ciudadanos, y permitir así que se materialice una gran coalición, el “guiño” de la Gran Logia de España enfatizando la condición de “leales ciudadanos” sometidos al imperio de la ley, es interpretado por los analistas como un “compás de espera” de la masonería en el caso de que no se fragüe la coalición.
Un total de 350 aprendices, compañeros y maestros de la GLE participaron en la Asamblea anual. En el máximo órgano de gobierno tienen derecho a voto todos los “maestros masones” que, en algún momento de su vida, han dirigido los trabajos de una logia.
Apoyo de la Federación JudíaLa Cumbre de Madrid contó con el apoyo del Presidente de la Federación de Comunidades Judías de España, Isaac Querub; del Presidente de la Conferencia Mundial de Grandes Logias Regulares; de 15 Grandes Maestros y 30 representantes de las Grandes Logias y Orientes de Andorra, Albania, Alemania, Austria, Azerbaiyán, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Costa de Marfil, Croacia, Escocia, Finlandia, Francia, Guinea, Hungría, India, Israel, Luxemburgo, Macedonia, Marruecos, Moldavia, Mónaco, Montenegro, Noruega, Paraguay, Pensilvania, Portugal, Rumanía, Serbia, Togo, Turquía y Ucrania.
Por lo que respecta al resto de organizaciones masónicas españolas, estuvieron presentes: el Supremo Consejo del Grado 33 y Último Grado del Rito Escocés Antiguo y Aceptado para España; el Supremo Gran Capítulo de los Masones del Arco Real; el Gran Priorato de las Ordenes Unidas, Religiosas, Militares y Masónicas del Temple, de San Juan de Jerusalén, Palestina, Rodas y Malta; el Gran Cónclave de la Orden del Monitor Secreto o Fraternidad de David y Johnatan en las Islas Británicas y sus Territorios de Ultramar; los Caballeros Sacerdotes Templarios del Sagrado Arco Real u Orden de la Sagrada Sabiduría; y el Gran Priorato Rectificado de España.