En otra entrevista monumental, el magnate de la tecnología Elon Musk, CEO de X y Tesla, se unió a la leyenda del podcast Joe Rogan. Durante esta entrevista, Musk ofreció una condena devastadora del superdonante demócrata y financiero de izquierda radical George Soros. Además, Rogan sorprendió al disparar una flecha a un camión Tesla mientras Musk explicaba por qué compró Twitter y compartía sus preocupaciones sobre los efectos a largo plazo de la plataforma. Por si fuera poco, Musk también brindó a los oyentes una idea de sus opiniones sobre la izquierda radical.
Rogan preguntó si, de alguna manera, cuando algo está impreso, ¿significa eso más porque otras personas van a ver esta cosa de? En el lado más ligero, los dos bromearon sobre ser cubiertos en The New York Times y hasta expresaron una preferencia por el hummus. "Si eres una figura de alto perfil como tú, es imposible hacer feliz a todo el mundo. Entonces, va a haber alguien que diga algo sobre ti. Ahí es donde se vuelve extraño", reflexionó.
"Comenzó a responder Musk diciendo: 'Bueno, supongo...' antes de que Rogan interrumpiera y dijera: 'Porque, básicamente, un artículo en The New York Times es simplemente la opinión de una sola persona y cualquier editor que se involucre'. Después de algunas bromas, Musk señaló: 'Encuentro que en estos días The New York Times es difícil de leer', lo cual llevó a Rogan a comentar: 'Desafortunadamente, cometen algunos errores graves. Como cuando Hamas bombardeó el...'"
Musk le dijo a Rogan que, al explicar sus sentimientos sobre el financiero de extrema izquierda George Soros, el envejecido agente de poder "odia fundamentalmente a la humanidad" y trabaja para promover agendas que "erosionan el tejido de la civilización". También señaló que el rasgo más importante de Soros es su capacidad para discernir oportunidades de "arbitraje", citando el histórico corto de Soros de la libra esterlina en los años 90. Sin embargo, más adelante observó que Soros se dio cuenta de que podía obtener una mejor inversión invirtiendo en "pequeñas" contiendas locales, para que los fiscales de distrito y los jueces controlaran cómo se aplican las leyes, en lugar de cómo se escriben.