El expresidente comunista de Perú, Pedro Castillo, ha hecho un polémico llamado a la guerra contra Estados Unidos desde su prisión en el penal de Barbadillo, durante su juicio por rebelión. En su declaración, instó a los presidentes de Colombia, Chile, Bolivia y Brasil a unirse en una lucha contra la delincuencia y la corrupción. Sus palabras han generado controversia, especialmente por su tono beligerante y su defensa del presidente colombiano Gustavo Petro en medio de tensiones diplomáticas. Castillo, quien fue arrestado tras un fallido autogolpe en diciembre de 2022, continúa intentando posicionarse como líder de los sectores marginados mientras enfrenta múltiples procesos judiciales. Para más detalles, visita el enlace.
Durante la sesión número 52 de su juicio oral por el delito de rebelión, el expresidente comunista de Perú, Pedro Castillo, realizó un pronunciamiento que ha generado gran controversia desde el penal de Barbadillo, donde se encuentra cumpliendo prisión preventiva tras su fallido intento de autogolpe en diciembre de 2022.
En su intervención, Castillo no solo rechazó nuevamente los cargos que se le imputan, sino que también utilizó este espacio judicial como una plataforma política para hacer un llamado a la unión de los países latinoamericanos. En un tono beligerante, instó a los presidentes de Colombia, Chile, Bolivia y Brasil a «ir a la guerra» contra los Estados Unidos, identificando lo que considera problemáticas estructurales compartidas.
Las declaraciones del exmandatario han suscitado un amplio debate, especialmente por la forma en que se dirigió a líderes regionales como Gustavo Petro, presidente de Colombia. Castillo solicitó públicamente una acción conjunta que, aunque revestida de un lenguaje agresivo, fue presentada como una «guerra» contra la delincuencia, la corrupción y el saqueo de recursos públicos.
«Desde acá invoco no solo al presidente Petro, también al presidente de Chile, de Bolivia, de Brasil: De una vez vamos a la guerra, pero a aquella guerra que termine con la delincuencia, con la corrupción, con el saqueo», expresó Castillo. Esta declaración se produjo a pesar de los intentos reiterados de la jueza Norma Carbajal por limitar su exposición a los puntos estrictamente relacionados con el juicio.
Además, Castillo aprovechó su intervención para defender al presidente colombiano en medio de las tensiones diplomáticas entre Perú y Colombia por la soberanía sobre la isla Chinería. Esta disputa reciente ha elevado el tono entre ambos países.
El expresidente criticó duramente a las autoridades peruanas, argumentando que no tienen «autoridad moral» para cuestionar a líderes como Petro. Asimismo, denunció lo que considera una persecución política en su contra: «Lo quieren juzgar a Petro, cuando en el Perú hay autoridades a las que no las reciben en ninguna plaza», afirmó Castillo, refiriéndose a la impopularidad de ciertos funcionarios peruanos.
Estas afirmaciones forman parte de un discurso político cada vez más confrontacional desde su celda. Castillo busca reactivar su imagen como líder de los sectores más marginados y presentarse como víctima de un sistema que lo persigue por intentar gobernar para los pobres.
No debe olvidarse que Pedro Castillo fue arrestado el 7 de diciembre de 2022, tras anunciar la disolución del Congreso y otras medidas interpretadas como un intento de autogolpe. Desde entonces permanece en prisión preventiva enfrentando múltiples procesos judiciales por rebelión y conspiración.
A raíz del fallido intento de asilo en la embajada de México en Lima, fue detenido y ha estado bajo custodia mientras enfrenta estos cargos graves.