Un nuevo estudio a largo plazo sugiere que el consumo diario de té está vinculado a una ligera mejora en la densidad ósea de las caderas en mujeres mayores. La investigación también encontró que un consumo moderado de café (de dos a tres tazas diarias) no perjudica la densidad mineral ósea. Sin embargo, el consumo excesivo de café (más de cinco tazas al día) se asoció con una menor densidad ósea, especialmente en mujeres con un mayor consumo de alcohol. Los investigadores atribuyen el posible beneficio del té a los catequinas, compuestos vegetales que podrían favorecer la formación ósea.
Los expertos enfatizan que, aunque el efecto es modesto, pequeños hábitos dietéticos pueden contribuir a la salud ósea junto con el ejercicio y minerales como calcio, boro y fósforo, así como la vitamina D.
Un ritual matutino significativo
¿Por qué es relevante un ritual matutino para millones de mujeres en proceso de envejecimiento? ¿Quién podría encontrar un aliado para la salud ósea en su taza de té? Un nuevo estudio longitudinal realizado por la Universidad Flinders en Adelaide proporciona respuestas matizadas, sugiriendo que las bebidas más populares del mundo pueden desempeñar un papel sutil pero significativo en la lucha contra la osteoporosis, una condición que afecta a aproximadamente tres millones de personas solo en el Reino Unido.
La investigación, publicada recientemente en la revista Nutrients, siguió a casi 10,000 mujeres de 65 años o más durante diez años, analizando sus hábitos de consumo de té y café junto con escaneos precisos de la densidad mineral ósea (DMO) en las caderas. La DMO en esta zona es un predictor crítico del riesgo de fracturas. Este extenso seguimiento permitió a los científicos observar tendencias a largo plazo y aportar claridad a un campo donde estudios anteriores han mostrado resultados contradictorios.
Efecto positivo del té
El análisis reveló que las mujeres que consumían té regularmente mostraron una DMO ligeramente superior en las caderas comparadas con aquellas que no lo hacían. Aunque el efecto fue modesto, resultó estadísticamente significativo. Los investigadores señalan que el rico contenido de catequinas en el té, un tipo de flavonoide y potente antioxidante, podría ser el mecanismo detrás de este beneficio. Estudios previos sugieren que estos compuestos vegetales pueden promover la formación ósea y ralentizar el proceso natural de degradación del hueso.
«Incluso pequeñas mejoras en la densidad ósea pueden traducirse en menos fracturas entre grandes grupos», explicó Enwu Liu, profesor asociado adjunto y coautor del estudio. Esto coincide con trabajos epidemiológicos históricos que encontraron una asociación entre bajo consumo de té y mayor riesgo de fractura de cadera.
Café y su relación compleja con la densidad ósea
Los hallazgos relacionados con el café fueron más complejos. El estudio tranquiliza a los bebedores moderados al indicar que consumir entre dos y tres tazas al día no se asocia con efectos perjudiciales sobre la DMO. Sin embargo, se observó un umbral: consumir más de cinco tazas diarias se vinculó con una menor densidad ósea. Los investigadores advierten que la cafeína puede interferir con la absorción del calcio en el intestino, mineral esencial para la fortaleza ósea.
Además, si se consume café en grandes cantidades, es probable que no se esté ingiriendo suficiente agua. Este efecto negativo se observó con mayor intensidad en mujeres con un mayor consumo histórico de alcohol. Es importante destacar que los autores del estudio mencionaron que añadir leche al café podría ayudar a mitigar el pequeño impacto negativo del café sobre el calcio.
Consideraciones finales sobre los hallazgos
Esta nueva investigación contribuye a una conversación científica continua sobre nutrición y salud ósea. Aunque encontró beneficios para quienes consumen té, no demostró una reducción directa del riesgo de fractura durante su periodo de seguimiento; este resultado concuerda con algunos estudios previos realizados en cohortes grandes. Otros estudios recientes han indicado que un alto consumo de té está asociado con un menor riesgo tanto para osteoporosis como para fracturas de cadera.
El equipo de la Universidad Flinders insta a tener cautela al interpretar estos resultados, señalando que hallazgos específicos—como los beneficios más marcados del té para mujeres obesas—requieren verificación adicional. «Nuestros resultados no implican que deban dejar el café o comenzar a beber té en exceso», afirmó Liu.
Beneficios potenciales del ritual diario
En última instancia, este estudio subraya que la salud ósea está influenciada por una variedad de factores, desde genética y ejercicio hasta nutrición. Si bien medidas comprobadas como minerales adecuados, vitamina D y ejercicio son fundamentales para prevenir osteoporosis, esta investigación sugiere que las elecciones diarias sobre bebidas podrían ser parte del enfoque integral hacia una mejor salud ósea.
Para los miles de millones que disfrutan del té y café alrededor del mundo, estos hallazgos ofrecen una perspectiva práctica: disfrutar diariamente una taza de té podría proporcionar un leve impulso para fortalecer los huesos envejecidos; mientras tanto, es crucial mantener moderación si se consume café en grandes cantidades.