En estos momentos históricos de Occidente debemos ser conscientes que nuestras élites son totalmente de las llamadas Extractivas. Esto provoca que las veamos como totalmente criticables, nadie quiera ser élite, y despreciamos esa posición excepto si se convierte en un acto de frivolidad –analicemos a todos los artistas, cantantes, actores, actrices y escritores de moda-.
La élites Creativas, tal como su palabra indica, son las que crearon las estructuras de ese GSO, junto con el Liderazgo, que también surgió de entre esas élites. Piénsese en los Cortés, Pizarro o Núñez de Balboa, los Ford, Rockefeller, Pompeyo o Cesar. Ellos iban en primera línea, sufrían igual o más que cualquiera de sus subordinados. Expuestos al peligro y la muerte como el que más. Arriesgados, creativos, imaginativos, generosos, sabios, atrevidos…
Esas familias crearon a sus hijos y los enviaban a la batalla al frente de sus tropas, cada una de ellas podía producir seis o siete varones –y a veces hembras- que caían en combate o por los peligros de las expediciones y conquistas. Trabajadores y ahorradores, no pensaban en otra cosa que en expandir su cultura, patria o movimiento. Piénsese en los guerreros y comerciantes Genoveses, Venecianos, Florentinos.
Pertenecen totalmente a esta situación y encuadramiento, aunque casi siempre pasan a ser las futuras élites, todos los que hicieron la revolución Inglesa, la Francesa, La Americana, La Rusa, La Cubana… Son los más inteligentes, luchadores, esforzados, generosos y preocupados por la causa. No les importa dejarlo todo y ponerse al servicio absoluto de la nueva idea, del nuevo liderazgo que constituyen las nuevas doctrinas de esa revolución. Luchando se demostró quienes eran los mejores, y los que sobreviven son los que constituirán las nuevas familias que serán las élites directoras de ese GSO.
¿Qué queremos decir cuando hablamos de élites Extractivas? El problema es que cuando llevan varios cientos de años, a veces menos -piénsese en los héroes Cubanos o Vietnamitas o Chinos- los nacidos en el seno de esas familias luchadoras, ahorradoras y esforzadas -que pueden ser los propios nietos, a veces hijos- se convierten en personas que lo han heredado todo. En sus cabezas solo cabe el lujo y el confort. De esfuerzo y sacrificio que no les hable nadie. Ellos solo quieren exhibir el título y cobrar las rentas. Casi todo su “modus vivendi” se convierte en pura hipocresía, porque dicen que son importantes en ese grupo social y exigen trato y privilegios, pero en realidad ese grupo social les importa un pepino. Solo les importa en función a lo que puedan Extraer de él. de ahí el nombre de Extractivas. Se convierte en parásitos sociales que buscan la fiesta y el lujo, la exhibición y a veces el escándalo, y nada ni nadie les importa porque pretenden vivir por encima del bien y del mal. Ellos solo son eso… la Élite.
No solo son las anunciadoras de la decadencia absoluta de ese GSO, sino que cabe preguntarse si no son las auténticas provocadoras de la misma, a la vez que del derrumbe económico y social. Porque dicen representar a aquel viejo liderazgo y alegan defenderlo por todos los medios, pero en realidad con sus actos, por sus demostraciones prácticas, lo que todo el mundo observa es que son los primeros que no creen en absoluto en lo que dicen predicar. Piénsese en todos los Aristócratas españoles de la “Contra-reforma”. Véanse sus amantes, sus adulterios, sus derroches de riqueza, y sin embargo todos los días en misa hablando de “Castidad y de Pobreza”. Unas de las élites extractivas más claras son las aristocracias Europeas, comenzando por la Inglesa y terminando en la Rusa, Alemana o Belga.
A esas élites extractivas que nadie les hable de expandir el grupo social, mejorarlo, reformarlo, ayudar a los necesitados o crear nuevas instituciones de Enseñanza o de Sanidad. No, a ellos solo les importa vivir bien en la cumbre económica, y si pueden social, y los verdaderos problemas de los componentes de ese GSO les traen… “Al Pairo”.
Sobre el autor
Carlos González-Teijón es escritor, sus libros publicados son Luz de Vela, El club del conocimiento, La Guerra de los Dioses, El Sistema, y de reciente aparición Psicología de virtudes y pecados, de editorial, Letras de autor.