El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, se reunirá con líderes europeos en Londres el próximo lunes, en un encuentro clave donde se discutirá la respuesta de los aliados de Ucrania ante la presión de Estados Unidos para que Kiev acepte concesiones en las negociaciones de paz. En esta reunión, Zelensky estará acompañado por el primer ministro británico Sir Keir Starmer, así como por los presidentes de Francia y Alemania.
Este alto nivel de diálogo sigue a tres días de conversaciones en Florida, donde el principal negociador ucraniano abogó por modificaciones a un plan de la Casa Blanca que ha sido ampliamente considerado como una acomodación a las demandas del Kremlin. Tanto Estados Unidos como Ucrania han afirmado que ha habido avances; sin embargo, el presidente estadounidense Donald Trump criticó a Zelensky, indicando que este último no había revisado el borrador del acuerdo propuesto.
Expectativas y Desafíos en las Negociaciones
Trump expresó su decepción al comentar que Zelensky aún no había leído la propuesta, lo cual consideró preocupante. Afirmó: "Sus personas están entusiasmadas... [Rusia] preferiría tener todo el país, pero creo que Rusia está bien con esto; aunque no estoy seguro de que Zelensky esté conforme". Estas declaraciones parecen referirse al último borrador del acuerdo de paz, revisado tras conversaciones lideradas por Rustem Umerov, nuevo jefe negociador ucraniano.
Casi simultáneamente a los comentarios de Trump, Zelensky anunció que recibiría información sobre las negociaciones por parte de Umerov ya sea en Londres o Bruselas, subrayando que "algunos temas solo pueden discutirse en persona" y no por teléfono. Además, destacó que sus interacciones con Witkoff y Kushner fueron "constructivas, aunque no fáciles".
Reunión Estratégica en Londres
Las conversaciones del lunes incluirán a Starmer, al presidente francés Emmanuel Macron y al canciller alemán Friedrich Merz, quienes representan a las tres naciones de la OTAN con los presupuestos militares más significativos (excluyendo a Estados Unidos). Desde Downing Street se indicó que la reunión se enfocará en las negociaciones de paz en curso y los próximos pasos a seguir.
El ministro del gabinete británico Pat McFadden mencionó la necesidad de explorar formas para garantizar que Ucrania pueda "decidir su propio futuro", enfatizando que deben existir garantías de seguridad significativas en caso de llegar a un acuerdo. El Reino Unido y Francia han liderado esfuerzos para formar una coalición internacional destinada a ofrecer apoyo defensivo futuro, incluyendo la posibilidad de desplegar fuerzas en el país.
Dificultades Persistentes y Propuestas Controversiales
Aún no está claro qué funciones desempeñará esta fuerza multinacional; fuentes diplomáticas han indicado previamente que no será utilizada para vigilar una línea de alto el fuego ni será considerada imparcial. Alemania y otros actores europeos han prometido asistencia defensiva, pero han manifestado escepticismo sobre el envío de tropas al territorio ucraniano debido a las posibles repercusiones con el Kremlin.
A medida que avanza la presión desde Washington para lograr un acuerdo rápido entre Kyiv y Moscú, las señales de un avance significativo siguen siendo escasas. Las negociaciones continúan siendo complicadas especialmente en torno a cuestiones territoriales; Estados Unidos ha sugerido que Ucrania retire completamente sus fuerzas de regiones orientales bajo intento ruso de captura.
Puntos Críticos en las Conversaciones
En particular, se destaca la complejidad del diálogo respecto a la planta nuclear de Zaporizhzhia. La intensa lucha alrededor de esta instalación ha suscitado preocupaciones sobre su seguridad. Un borrador filtrado del plan respaldado por Estados Unidos propuso dividir la energía generada entre Ucrania y Rusia en el futuro.
A pesar del considerable desgaste económico y pérdidas militares sufridas por Rusia, el Kremlin ha mostrado poca disposición para ceder en sus demandas fundamentales, incluyendo la exclusión futura de Ucrania dentro de la OTAN. La situación sigue siendo tensa mientras ambas partes buscan un camino hacia adelante en medio del conflicto prolongado.