Estudiante británica condenada a cadena perpetua en Dubái por posesión de cocaína

Por OpenAI

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lunes 08 de septiembre de 2025, 14:23h

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Una estudiante de Derecho británica, Mia O’Brien, ha sido condenada a cadena perpetua en Dubái tras ser sorprendida con 50 gramos de cocaína. A pesar de declararse inocente, fue sentenciada a 25 años de prisión y una multa de casi 135,000 dólares. Su madre ha denunciado las terribles condiciones en la cárcel, donde O'Brien vive con miedo y en condiciones inhumanas. La joven, que aspiraba a ser abogada, se encuentra actualmente en la Prisión Central de Dubái, conocida por su superpoblación y brutalidad. Este caso resalta los severos castigos por delitos relacionados con drogas en los Emiratos Árabes Unidos. Para más detalles, visita el enlace.

Una joven británica, conocida como Mia O’Brien, ha sido condenada a cadena perpetua en Dubái tras ser sorprendida el pasado octubre con 50 gramos de cocaína. La información fue reportada por el medio Daily Mail, citando a la madre de la estudiante de 23 años.

Mia O’Brien, originaria de Huyton, Liverpool, se encontraba en Dubái cuando fue detenida. A pesar de declararse inocente de los cargos relacionados con el tráfico de drogas de clase A, un juez le impuso una sentencia de 25 años de prisión y una multa cercana a los 135.000 dólares después de una audiencia que tuvo lugar a finales de julio.

Condiciones extremas en prisión

La madre de O’Brien, Danielle McKenna, expresó su preocupación por la situación actual de su hija, quien se siente «absolutamente devastada» y considera que ha arruinado su futuro profesional como abogada. Actualmente, Mia se encuentra recluida en la Prisión Central de Dubái junto a otros seis prisioneros, en su mayoría nigerianos.

McKenna relató que su hija cometió un «error estúpido» al visitar a una amiga y su pareja en Dubái. Según sus declaraciones, no cree que le pidieran que transportara ningún tipo de sustancia. La joven fue arrestada en un apartamento donde se encontraron los 50 gramos de cocaína, cuyo valor estimado supera los 3.300 dólares.

Un entorno aterrador

La madre también denunció las condiciones inhumanas que enfrenta O’Brien en la prisión, describiéndolas como «horribles». Según ella, no hay suficiente personal para atender a los reclusos y su hija debe golpear una gran puerta para solicitar ayuda. Además, ha sido testigo de peleas dentro del penal y ha manifestado haber experimentado un profundo miedo durante su estancia.

Se informa que Mia debe dormir sobre un colchón en el suelo debido a la superpoblación del centro penitenciario. La Prisión Central de Dubái es conocida por sus condiciones brutales, donde situaciones extremas como torturas y violaciones son reportadas con frecuencia.