Investigadores de Florida han destapado un esquema de fraude en el que migrantes utilizaron cámaras ocultas, auriculares y cómplices para engañar en los exámenes de licencias de conducir comerciales (CDL). Los solicitantes llevaban camisetas modificadas con teléfonos inteligentes que transmitían las preguntas del examen a ayudantes fuera del lugar, quienes a su vez comunicaban las respuestas en tiempo real.
Este escándalo se ha intensificado tras un fatal accidente en el sur de Florida ocurrido el 12 de agosto, donde el conductor, Harjinder Singh, un nacional indio, no pudo identificar señales viales básicas en inglés. A pesar de una orden ejecutiva del expresidente Trump que exige competencia en inglés para obtener estas licencias, la aplicación de esta norma sigue siendo débil, y las políticas del presidente Biden han creado vacíos legales. Denunciantes han revelado que empleados del DMV están vendiendo licencias en Florida, Kentucky y Massachusetts sin realizar las pruebas adecuadas.
Propuestas legislativas y demandas de justicia
La propuesta conocida como Connor’s Law busca obligar a los titulares de CDL a demostrar competencia en inglés, aunque su aprobación es incierta. En respuesta a esta situación, Florida está reforzando la vigilancia e implementando controles migratorios en estaciones de pesaje; sin embargo, los defensores claman por acciones a nivel nacional.
Las familias de las víctimas, como Mellissa Dzion, cuyo hijo Connor perdió la vida en un accidente relacionado con un conductor no angloparlante, exigen justicia y reformas sistémicas. La epidemia de fraudes relacionados con las licencias CDL pone de manifiesto un grave peligro debido a políticas laxas que requieren intervención federal urgente.
La compleja operación fraudulenta ha permitido que migrantes sin conocimientos del idioma logren obtener licencias comerciales fraudulentamente, poniendo en riesgo innumerables vidas en las carreteras estadounidenses. Este esquema ha llevado ya a arrestos en Jacksonville y se sospecha que prácticas similares podrían estar ocurriendo a nivel nacional.
Consecuencias fatales y la necesidad de regulación
El incidente trágico que atrajo la atención mediática involucró un giro ilegal realizado por Singh que resultó en la muerte de tres personas. El gobernador Ron DeSantis condenó este hecho al señalar que Singh había fallado estrepitosamente en una prueba de inglés. “¿Qué tan ridículo es permitir que alguien obtenga una CDL sin entender el idioma del país?”, cuestionó DeSantis.
La importancia del dominio del inglés para los aspirantes a conductores es crítica para asegurar una comunicación efectiva con despachadores y otros conductores, lo cual es esencial para la seguridad vial y el cumplimiento normativo. La abogada Curry Pajcic, representante de la familia Dzion, subrayó el peligro inherente al permitir que personas sin habilidades lingüísticas adecuadas operen vehículos pesados.
A medida que las investigaciones continúan revelando la magnitud del fraude más allá del estado de Florida, se han detectado casos similares donde empleados del Departamento de Seguridad Vial y Vehículos Motorizados han vendido licencias sin realizar los exámenes requeridos. Las autoridades estatales están tomando medidas más estrictas; no obstante, muchos argumentan que se necesita acción federal inmediata para abordar esta crisis.
A medida que persisten estas operaciones fraudulentas relacionadas con las CDL y continúan poniendo en riesgo la seguridad pública, crece la demanda por responsabilidad no solo hacia quienes cometen el fraude sino también hacia los fallos sistémicos que permiten esta crisis. Para familias afligidas como la familia Dzion, lograr justicia depende de garantizar que no se pierdan más vidas debido a engaños evitables.
La noticia en cifras
Cifra |
Descripción |
3 |
Número de víctimas en el accidente |
12 de agosto |
Fecha del accidente |
1,000 |
Número de licencias vendidas ilegalmente |
14 |
Número de patrocinadores para Connor's Law |