Un pizzero enfrenta juicio por un crimen atroz en Francia
Philippe Schneider, un excarnicero de 69 años convertido en pizzero, se encuentra bajo juicio en el departamento francés de Aveyron, acusado de un crimen horrendo: el asesinato de un hombre, su descuartizamiento y la cocción de partes de su cuerpo junto a verduras para ocultar las evidencias del delito.
A pesar de que Schneider habría confesado los hechos, según reportes mediáticos, durante la investigación ofreció diversas versiones sobre lo sucedido.
Detalles del crimen y la investigación
El crimen ocurrió en febrero de 2023 en el pueblo de Brasc. La víctima, Georges Meichler, de 60 años, vivía solo en una casa aislada sin agua corriente ni electricidad. La situación se tornó alarmante cuando su hija no pudo contactarlo y comenzó a recibir mensajes de texto extraños que no coincidían con el estilo habitual de su padre, lo que llevó a alertar a las autoridades sobre su desaparición.
Las investigaciones llevaron a los agentes hasta Schneider y su pareja, Nathalie Caboubassy, de 45 años, quienes fueron encontrados circulando por el pueblo en el automóvil de Meichler. Ambos se presentaban como druidas y habían residido en la región desde 2019. Inicialmente, Schneider había comenzado vendiendo brebajes herbales en un establecimiento que hacía pasar por un «sex shop» con «pociones mágicas», antes de abrir su pizzería Don Filiippo en la comuna Saint-Sernin-sur-Rance.
Confesiones y cargos contra los implicados
Cuando fueron detenidos en el vehículo de la víctima, afirmaron que Meichler les había prestado el auto mientras estaba de vacaciones; sin embargo, esta versión pronto se desmoronó. Posteriormente, Schneider intentó atribuir la muerte a un accidente durante un altercado. En su último relato, admitió haber ido a la casa de Meichler a robar cannabis, con la ayuda del sepulturero Loup Benrakia, quien también es considerado sospechoso.
Según el testimonio proporcionado por Schneider, ambos ataron y amordazaron a Meichler, y al finalizar su búsqueda se dieron cuenta de que había fallecido por asfixia. Tras esperar tres días «para respetar la transmigración del alma», Schneider desmembró el cuerpo utilizando un cuchillo de carnicero en su hogar y quemó algunos órganos. Luego regresó a la casa de Meichler para cocinar partes del cadáver junto a verduras con el fin de disimular el olor. Finalmente, incineró la cabeza, las manos y los pies del hombre, esparciendo las cenizas mientras oraba por la salvación del alma del difunto.
Alegaciones legales y estado mental del acusado
El abogado defensor de Schneider, Luc Abratkiewicz, declaró que su cliente asume plenamente su responsabilidad por todos los actos que se le imputan. Según él, Schneider estaba bajo los efectos del alcohol y las drogas al momento del crimen y presentaba un estado mental alterado.
Schneider enfrenta cargos por secuestro que resultó en muerte, ocultamiento de cadáver y ultraje a la integridad del cuerpo. Por otro lado, Caboubassy y Benrakia están siendo procesados por complicidad. Se anticipa que el veredicto será anunciado el próximo 22 de mayo.