La influencer Michelle Sky Hayward ha captado la atención de las redes sociales tras compartir un video en el que parece nadar en lo que se presume son aguas residuales. Las imágenes, grabadas a principios de julio en una playa de Sudáfrica, muestran a la creadora de contenido disfrutando del momento, mientras la espuma del agua golpea su rostro. En el video, Hayward expresa: «Me estoy divirtiendo tanto que, literalmente, ni siquiera siento frío», y añade que este es uno de sus lugares favoritos para nadar.
Sin embargo, la situación dio un giro inesperado cuando, horas después de publicar el video, la influencer fue informada por sus seguidores sobre la verdadera naturaleza del agua en la que se encontraba. En respuesta a los múltiples comentarios alertándola sobre el riesgo sanitario, Hayward publicó otra actualización en la que admitió: «me temo que he cometido un gran error». Hasta el momento, no ha reportado síntomas de infección.
Controversia sobre la calidad del agua
A pesar de su declaración, el debate sobre si realmente se trataba de agua contaminada continúa. Algunos usuarios han señalado que el aspecto de la espuma podría corresponder a una alta concentración de materia orgánica disuelta en el agua. Esta controversia ha suscitado preocupación entre quienes advierten sobre los peligros de nadar en aguas no aptas para el público.
El incidente ha generado un amplio interés mediático y ha puesto de relieve los riesgos asociados con actividades recreativas en cuerpos de agua cuya calidad no ha sido verificada. La viralidad del video plantea interrogantes sobre la responsabilidad de los creadores de contenido al compartir experiencias que podrían influir en sus seguidores.
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