Durante un reciente allanamiento de morada en el estado de Washington, los ocupantes masculinos golpearon a los ladrones armados y les robaron el rifle, dándose cuenta de que apuntaron a la casa equivocada. El desgarrador incidente ocurrió en Tacoma alrededor de las 10 p.m. del 26 de octubre, pero los videos se hicieron públicos esta semana.
Según una declaración jurada de las autoridades, en un garaje abierto y mientras bebían cerveza, tres hombres fueron abordados por dos sospechosos enmascarados que les apuntaron con un rifle y les exigieron la entrega de objetos de valor. Durante el altercado que se produjo a continuación, uno de los hombres sentados recibió un golpe en la cara con la boca del rifle. Pocos momentos después, otro de los hombres se lanzó sobre los sospechosos y se desencadenó una pelea cuerpo a cuerpo.
Durante la pelea captada por múltiples cámaras de vigilancia, los sospechosos fueron golpeados y les quitaron el rifle. Las imágenes muestran que, de repente, un Mercedes-Benz corrió por la calle y embistió los autos de la víctima, causando daños significativos. A toda velocidad, se alejaron cuando uno de los sospechosos saltó al auto de lujo.
Durante la persecución, el Mercedes que se dirigía hacia el norte por la I-5 fue localizado y perseguido por el Departamento de Policía de Tacoma. Según los informes, el conductor logró alcanzar velocidades de hasta 130 mph, y finalmente se estrelló en una carretera de superficie. Después del accidente, los sospechosos abandonaron el vehículo y continuaron su huida a pie, pero fueron capturados en un almacén cercano.
Se ha identificado a uno de los sospechosos como un menor de 16 años, mientras que el otro, quien se cree que es el conductor, ha sido identificado como Nicolás Acahua. Según las autoridades, Acahua tiene antecedentes penales graves, incluyendo condenas por robo en segundo grado y asalto en segundo grado. "El conductor del Mercedes fue identificado por uno de los oficiales como el acusado Acahua. Después de su arresto, se le informaron sus derechos Miranda al acusado, pero él se negó a hacer una declaración", afirmaron los fiscales.
"Cuando los oficiales llegaron al hospital con el acusado, vio a N.G. y 'asintió y sonrió' a N.G. 'como si estuviera orgulloso de lo que había hecho'. Más tarde, hizo declaraciones no solicitadas, que incluían decir: 'Todo lo que hay en el coche es mío'. Además, se informó previamente que el Mercedes utilizado en el crimen fue robado en Tacoma el 24 de octubre."