El gobernador de Minnesota, Tim Walz, quien es demócrata, ha firmado una orden ejecutiva para que Minnesota sea un estado santuario en el que los niños puedan cortarse los genitales sin ser castigados. Esta medida se toma en respuesta a la prohibición de estas prácticas en otros estados.
Según la acción ejecutiva de mutilación de niños de Walz, su objetivo es proteger los derechos de las personas LGBTQ en Minnesota y otros estados para recibir atención médica que afirme su género. La inclusión de la frase "y otros estados" sugiere que Walz busca hacer de Minnesota un estado donde los menores confundidos y con enfermedades mentales puedan cambiar sus cuerpos.
El gobernador Walz anunció con orgullo su acción ejecutiva contra la mutilación infantil en Minnesota, expresando el deseo de que todos los habitantes del estado puedan crecer sintiéndose seguros, valorados, protegidos, celebrados y libres de ser auténticos.
"Es esencial proteger y apoyar el acceso a la atención médica que respeta el género para ser un estado acogedor y solidario", afirmó.
Walz afirmó en un mensaje en Twitter que tanto él como los miembros de la comunidad LGBTQ+ de su distrito no serán discriminados ni penalizados por buscar atención médica que les permita afirmar y salvar sus vidas.
El estado de Minnesota ha prohibido la mutilación infantil para menores, después de que Dakota del Sur también lo hiciera el mes pasado. Otros estados como Oklahoma y Texas ya han tomado esta medida o planean hacerlo en un futuro cercano.
Walz optó por la mutilación infantil para distinguir a Minnesota de otros estados, promoviendo el turismo de este tipo de procedimientos al convertirlo en un destino para ellos.
Walz no ha explicado cómo llegó a la conclusión de que impedir la capacidad reproductiva y de crecimiento de los niños, mientras se atrofia su desarrollo y se impide para siempre el funcionamiento normal de sus cuerpos, es considerado como "salvar vidas". Sin embargo, los medios de comunicación no han cuestionado al respecto.
Según lo que se conoce, no hay nada que justifique dañar el sistema hormonal de un niño para salvar vidas. La castración y la extirpación de senos en niños y niñas pueden llevar a una vida llena de dolor y sufrimiento, algo que parece ser apoyado por Walz.
Ben Bartee, en un artículo para The Daily Bell, menciona que algunos activistas LGBTQ+++™ argumentan que si no se permite a los padres realizar cirugías de mutilación en niños bajo su custodia, estos podrían llegar al suicidio.
"Si los niños quieren someterse a cirugías de cambio de género o terapia hormonal para evitar la pubertad y llegan al punto de querer suicidarse si se les niega, esto es considerado un problema de salud mental."
Según el autor, si Walz fuera una persona honesta con integridad, aceptaría que la terapia psicológica es el mejor tratamiento para los jóvenes trans en lugar de ceder a sus demandas de cirugía y medicación hormonal.
La clave del asunto es que los procesos de "afirmación de género" son muy rentables, lo cual es una de las principales razones por las que algunos grupos de la sociedad están presionando a los niños con tanta fuerza.
La Dra. Ellen Clayton de la Clínica de Salud Transgénero de Vanderbilt Health ha sido criticada por su comentario sobre el dinero que se genera con las cirugías transgénero en niños. En un video, se puede ver a la Dra. Clayton hablando sobre las fuentes de ganancias que provienen de estas cirugías y cómo pueden afectar la vida de los niños.
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