Promete, como es usual ante las partes más pobres del globo, pero que después no será tanto.
Organizaciones evangelistas detrás del Bitcoin como en El Salvador, un país que dispone de caldo de cultivo para estos operativos rápidos y con alta promesa.
"Todo sin fines de lucro y con el aval de una religión"
En todo esto se encuentran colaborando ex marines estadounidenses y ciertos profesionales del sector financiero.
Sin embargo, el Bitcoin tiene una alta fluctuación en su valor.
Lo que sucede que, mientras la gente no despierte de su letargo, no va a poner a disposición su propia vida y dirigir su propósito hacia algo positivo que vaya en convergencia con otros, que es lo que nos hace falta.
Hace falta el renacer de una nueva especie humana valiente en genes.
Todos esto son falsas puertas, vengan de donde vengan.