Donald Trump anunció un exitoso ataque aéreo de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos contra tres instalaciones nucleares clave en Irán: Fordow, Natanz e Isfahán. En su mensaje, celebrado como un "gran éxito", Trump destacó la precisión y eficiencia del operativo, que incluyó una carga completa de bombas sobre la planta de Fordow. Este ataque busca desmantelar las capacidades nucleares iraníes y reafirmar la seguridad global ante las amenazas del régimen de Teherán. Trump también mencionó que este momento podría abrir la puerta a la paz y a nuevas negociaciones diplomáticas. Para más detalles, visita el enlace.
Las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos llevaron a cabo un ataque aéreo de alta precisión contra tres instalaciones nucleares fundamentales de Irán: Fordow, Natanz e Isfahán. Este operativo, que se destacó por su profesionalismo y eficiencia táctica, fue anunciado por el presidente Donald Trump, quien lo calificó como un “gran éxito” en su plataforma Truth Social.
En su mensaje, Trump afirmó: “Hemos completado con gran éxito nuestro ataque contra las tres instalaciones nucleares de Irán, incluyendo Fordow, Natanz e Isfahán”. La acción ha generado una serie de reacciones tanto en el ámbito político como en el internacional.
El objetivo principal del ataque fue la planta de Fordow, una instalación subterránea de enriquecimiento de uranio, considerada altamente protegida por el régimen iraní. Esta instalación había suscitado crecientes preocupaciones entre las naciones del mundo debido a su avance hacia capacidades nucleares ofensivas.
Trump detalló que la planta fue blanco de una “carga completa de bombas”, lanzada por una flota de aviones que logró retirarse sin bajas. “Todas las aeronaves se encuentran ahora fuera del espacio aéreo iraní. Se lanzó una carga completa sobre la instalación principal, Fordow", aclaró el presidente estadounidense.
Este operativo no solo pone de manifiesto la capacidad tecnológica y estratégica del ejército estadounidense, sino que también envía un mensaje claro en defensa de la seguridad global, al evitar que Irán obtenga armas nucleares.
A medida que se intensifican las amenazas regionales y ante la negativa persistente de Teherán para reiniciar negociaciones sobre su programa nuclear, Washington optó por esta respuesta contundente y quirúrgica destinada a diluir las capacidades bélicas y nucleares del régimen iraní.
Trump expresó su reconocimiento hacia las Fuerzas Armadas: “Felicitaciones a nuestros grandes guerreros estadounidenses. Ningún otro ejército en el mundo podría haber hecho esto". Además, enfatizó que esta intervención no busca prolongar tensiones, sino abrir una nueva etapa: “¡Ahora es la hora de la paz!", concluyó.
Poco después de emitir este mensaje, Trump anunció que ofrecerá un discurso a la nación: “Daré un discurso a la nación a las 22:00 h en la Casa Blanca sobre nuestra exitosa operación militar en Irán. Este es un momento histórico para Estados Unidos, Israel y el mundo. Irán debe ahora aceptar poner fin a esta guerra. ¡Gracias!"
A través de esta operación, Estados Unidos reafirma su capacidad disuasiva y envía un mensaje directo a actores hostiles. Al mismo tiempo, crea condiciones propicias para reanudar el diálogo internacional desde una posición más segura y clara.