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Israel amenaza a Líbano con guerra si no desarma a Hezbollah para 2025

Conflicto Medio Oriente

OpenAI | Martes 02 de diciembre de 2025

Israel's Defense Minister, Israel Katz, has issued a dire ultimatum to Lebanon, demanding the disarmament of Hezbollah by the end of 2025 or face a new military offensive. This escalation raises fears of a broader conflict in the region, with the U.S. poised to support Israel's stance. Analysts suggest that Israel's push for war is linked to a larger strategy involving U.S. confrontation with Iran, which could lead to a global energy crisis if oil prices soar as a result. The Israeli military faces significant challenges, including manpower shortages and recent losses against Hezbollah, complicating its ability to engage in prolonged warfare. As tensions rise, the implications for regional stability and international relations become increasingly severe. For more information, visit the full article at Cibeles Biblioteca.



Ultimátum de Israel a Líbano: Un conflicto inminente

Los ecos de la guerra resuenan nuevamente, pero esta vez con un ritmo más desesperado y consecuencias potencialmente devastadoras. El Ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, ha emitido un ultimátum contundente a Líbano: desarmar a Hezbollah antes de finales de 2025 o enfrentar una nueva y contundente campaña militar israelí. Estados Unidos se ha mostrado dispuesto a respaldar esta amenaza, lo que plantea interrogantes sobre los motivos detrás del impulso israelí hacia un conflicto que podría desbordarse y los verdaderos beneficiarios de una guerra que podría encender el Medio Oriente.

Entre los puntos clave se destaca que el Ministro Katz ha advertido sobre las graves repercusiones si Hezbollah no es desarmado en el plazo estipulado. Además, se señala que Estados Unidos está presionando al gobierno libanés para que actúe contra Hezbollah, incluso a riesgo de provocar una guerra civil. La situación es crítica, ya que las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) están optimizadas para conflictos breves y enfrentan una significativa escasez de personal.

Una fuerza militar al borde del colapso

Bajo la fachada de poderío, se encuentra una fuerza militar en dificultades. Las IDF, tradicionalmente consideradas como una potencia regional invencible, presentan serias fisuras. Su estructura fue diseñada para conflictos intensos y breves, no para la prolongada guerra de desgaste que enfrentan actualmente. Esto ha resultado en una notable disminución del número de soldados, incluyendo trágicos casos de suicidio que afectan la economía nacional. Ante la falta de personal, las IDF han comenzado a reclutar judíos ortodoxos, un grupo previamente exento del servicio militar.

Este reclutamiento genera tensiones internas, ya que la cultura «woke» dentro del ejército disuade a muchos reclutas ortodoxos. La imagen de un ejército unido y poderoso se ve comprometida. Recientes enfrentamientos han revelado una nueva realidad preocupante; Hezbollah está causando bajas significativas entre las fuerzas israelíes en la frontera, obligando a retiradas. Esta situación contrasta drásticamente con 2006, cuando las fuerzas israelíes avanzaban rápidamente hacia Beirut.

La agenda del Gran Israel y el papel de Estados Unidos

Ante este panorama, surge la pregunta: ¿por qué un país con un ejército debilitado buscaría abrir otro frente? La respuesta puede estar relacionada con una visión que trasciende las fronteras libanesas. Desde hace décadas circula entre ciertos círculos sionistas el concepto del «Gran Israel», que incluye reclamaciones territoriales sobre partes de Egipto, Arabia Saudita, todo Líbano y porciones de Siria e Irak.

Para llevar a cabo esta ambición expansionista, Israel necesita el respaldo militar total de Estados Unidos. Esta estrategia no es nueva; los acontecimientos posteriores al 11-S fueron utilizados como pretexto para iniciar una «guerra contra el terrorismo» que convenientemente apuntó a los principales enemigos de Israel en el Medio Oriente.

Las catastróficas consecuencias de una guerra fabricada

Si este plan prospera y Estados Unidos es arrastrado a un conflicto con Irán, las repercusiones serán catastróficas para el mundo. Irán posee un potente recurso retaliatorio: el suministro global de energía. Al cerrar el Estrecho de Ormuz y dañar campos petroleros en naciones aliadas, Irán podría hacer que los precios del petróleo se disparen hasta alcanzar estimaciones cercanas a $250 por barril.

A medida que Occidente lidia con el caos económico resultante, Rusia sería la principal beneficiaria al ver triplicar sus ingresos por exportación de petróleo y gas. El costo humano también sería inmenso; algunos analistas militares prevén pérdidas potenciales superiores a 50 mil soldados estadounidenses si Irán ataca bases norteamericanas en respuesta.

El sacrificio estadounidense podría ser inmenso sin recompensas claras para su población. Aquellos que cuestionen por qué están sacrificándose por Israel podrían ser estigmatizados como antisemitas en un esfuerzo concertado por silenciar cualquier disidencia contra el sionismo.

Fuentes:

La noticia en cifras

Cifra Descripción
2025 Fecha límite para desarmar a Hezbollah según el ultimátum de Israel.
$250 Precio estimado por barril de petróleo en caso de un conflicto mayor.
$100 mil millones Cantidad supuestamente donada por Sheldon Adelson a la campaña de Trump para priorizar intereses israelíes.
50,000 Pérdida potencial de tropas estadounidenses en caso de represalias iraníes.

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