Un anciano de 80 años ha sido acusado de asesinar brutalmente a su esposa de 78 en Maryland tras una discusión relacionada con un "asunto con su médico". El incidente ocurrió en su apartamento en una comunidad para adultos mayores, donde el hombre empujó a la mujer al suelo y le presionó la garganta con un martillo. La policía encontró a la víctima con múltiples heridas y signos de traumatismo. Se le ha clasificado la muerte como homicidio, y el acusado enfrenta un juicio que podría resultar en cadena perpetua. Actualmente, está detenido sin derecho a fianza mientras se evalúa su estado mental.
Un hombre de 80 años ha sido acusado de asesinar a su esposa de 78 en su apartamento ubicado en una comunidad privada para adultos mayores en el condado de Montgomery, Maryland. La Policía local informó sobre el incidente ocurrido el pasado sábado, según documentos judiciales que han sido citados por diversos medios de comunicación.
El altercado entre Vivian Stewart Nation y su cónyuge, Beverly Fletcher, se originó por un conflicto relacionado con “un asunto con su médico”. Durante la discusión, Nation empujó a Fletcher al suelo y le presionó la garganta utilizando un martillo. Al llegar al lugar del crimen, los agentes encontraron a la víctima con múltiples puñaladas y signos evidentes de un traumatismo contundente.
Además del martillo, las autoridades hallaron un cuchillo y un desatornillador en la sala del apartamento, los cuales presentaban lo que parecía ser sangre. A pesar de los esfuerzos realizados, la mujer fue declarada muerta en el lugar. Posteriormente, la oficina del médico forense de Baltimore determinó que Fletcher falleció debido a lesiones ocasionadas por un objeto cortante, clasificando su muerte como homicidio.
En una audiencia celebrada recientemente, un juez ordenó que Nation se sometiera a una evaluación psiquiátrica antes de continuar con el proceso judicial, dado que existen preocupaciones sobre su capacidad cognitiva. Actualmente, el acusado permanece detenido sin derecho a fianza mientras enfrenta cargos de asesinato en primer grado. Si es declarado culpable, podría enfrentar una pena máxima de cadena perpetua.