Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, ha resaltado la importancia de las nuevas técnicas genómicas para garantizar la seguridad alimentaria en la Unión Europea. Durante una jornada sobre mejora genética, Planas destacó que estas tecnologías son clave para aumentar la competitividad del sector agroalimentario frente al cambio climático y otros desafíos como el desperdicio alimentario. Afirmó que permiten desarrollar cultivos más resistentes y sostenibles, lo que beneficiará tanto la productividad como la calidad nutricional. Además, enfatizó la necesidad de una regulación coherente a nivel comunitario para competir en igualdad de condiciones con otros países. La regulación de estas técnicas avanza en el marco de un reglamento aprobado por el Consejo de la UE y se espera su implementación durante la presidencia danesa a finales de este año. Para más información, visita el enlace: https://biblioteca.cibeles.net/luis-planas-destaca-las-nuevas-tecnicas-genomicas-como-clave-para-garantizar-la-seguridad-alimentaria-en-la-ue/
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Luis Planas, ha resaltado la importancia de las nuevas técnicas genómicas como herramienta fundamental para fortalecer la competitividad del sector agroalimentario español. Durante su intervención en la inauguración de una jornada dedicada al potencial de estas innovaciones tecnológicas, Planas enfatizó que su implementación es vital para asegurar la seguridad alimentaria en el contexto actual marcado por el cambio climático.
Planas argumentó que es esencial desarrollar cultivos y semillas más resistentes a plagas y condiciones climáticas adversas. Según sus palabras, estos avances no solo deben aumentar la productividad, sino también mejorar la calidad nutricional y prolongar la vida útil de los productos agrícolas. "Las nuevas técnicas genómicas son especialmente relevantes porque permiten modificar el material genético de manera precisa y eficiente", afirmó el ministro.
Además del cambio climático, el ministro abordó otros desafíos significativos que enfrenta el sector, tales como la necesidad de mejorar los rendimientos agrícolas y reducir el desperdicio alimentario. Las tecnologías genómicas se presentan como una solución para disminuir el uso de productos fitosanitarios y fertilizantes sin comprometer la productividad y con la garantía de incrementar la rentabilidad de las explotaciones agrícolas.
Estas declaraciones fueron realizadas en un evento organizado por el Ministerio de Agricultura junto al Centro de Investigación en Agrigenómica, en el marco de un proyecto colaborativo entre ambas instituciones. Planas subrayó que otros países ya están avanzando en este ámbito tecnológico, lo que hace necesario que Europa adopte medidas similares para poder competir en igualdad de condiciones.
El ministro también hizo hincapié en la importancia de establecer un entorno regulatorio coherente a nivel internacional que favorezca la cooperación entre naciones. "No debemos permitir que las diferencias regulatorias se conviertan en un obstáculo comercial frente a otros países o bloques", destacó.
Planas expresó su firme compromiso con la regulación de las nuevas técnicas genómicas en España, asegurando que no aceptará ninguna postura que no implique un avance significativo hacia el futuro. En este sentido, recordó que España ha sido un defensor activo dentro de la Unión Europea para regular estas tecnologías desde su presidencia durante el segundo semestre de 2023.
Finalmente, mencionó que un reglamento sobre estas técnicas fue aprobado por el Consejo de la UE en marzo pasado y actualmente se encuentra en negociación con el Parlamento Europeo y la Comisión Europea, con miras a su implementación a finales del presente año durante la presidencia danesa.
Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, destacó que las nuevas técnicas genómicas son clave para aumentar la competitividad del sector agroalimentario y garantizar la seguridad alimentaria en la Unión Europea.
El ministro mencionó tres desafíos importantes: el cambio climático, la consecución de mejores rendimientos y la reducción del desperdicio alimentario.
Las nuevas técnicas genómicas pueden ayudar a desarrollar cultivos más resistentes a plagas, enfermedades y condiciones climáticas adversas, además de mejorar la productividad y calidad nutricional.
Además de aumentar la resistencia de los cultivos, las nuevas técnicas genómicas permitirán reducir el uso de productos fitosanitarios y fertilizantes sin comprometer la productividad.
España ha mostrado ambición en regular las nuevas técnicas genómicas y busca avanzar en un marco regulatorio que permita competir en igualdad de condiciones con otros países.
Se espera que el reglamento aprobado por el Consejo de la UE sea negociado con el Parlamento Europeo y la Comisión Europea para su implementación a finales del año durante la presidencia danesa.