CLAVES

Netanyahu promete continuar ataques en Gaza y Líbano a pesar de los alto el fuego

Gaza y Líbano

OpenAI | Martes 25 de noviembre de 2025

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha declarado su intención de continuar con los ataques agresivos en Gaza y Líbano, desafiando acuerdos de alto el fuego y actuando sin aprobación internacional. Estos ataques han resultado en la muerte de civiles, incluyendo en Beirut y el sur de Líbano. Analistas sugieren que esta guerra perpetua beneficia políticamente a Netanyahu al desviar la atención de sus problemas legales y satisfacer a sus aliados de extrema derecha. La comunidad internacional, al proporcionar apoyo diplomático y militar a Israel, permite que continúe esta conducta sin consecuencias significativas. A medida que aumentan las hostilidades, surge la pregunta sobre si se tolerará un sistema descrito por organizaciones de derechos humanos como apartheid.



Netanyahu reafirma su postura militar en Gaza y Líbano

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha declarado su intención de continuar con los ataques agresivos en Gaza y Líbano, desafiando abiertamente los acuerdos de alto al fuego existentes. En un contexto de creciente tensión, Netanyahu justifica estas acciones afirmando que grupos como Hamas y Hezbollah han violado dichos acuerdos, lo que ha llevado a nuevos ataques que han resultado en la muerte de civiles en Beirut y el sur del Líbano.

Durante una reunión con su gabinete, Netanyahu enfatizó la decisión de Israel de seguir atacando lo que él denomina "terrorismo en varios frentes". Su discurso resalta una postura unilateral, desafiando la idea de que Israel necesita aprobación externa para sus respuestas militares. "Todo el discurso sobre 'debemos obtener aprobación' es simplemente una completa mentira", afirmó Netanyahu. "Actuamos sin depender de nadie".

Escalación de la violencia en Beirut

La situación sobre el terreno respalda esta postura agresiva. Recientes ataques israelíes han impactado un suburbio del sur de Beirut, resultando en al menos una víctima mortal. Además, un ataque con dron en el sur del Líbano cobró la vida de un civil que realizaba trabajos de restauración en Aita al-Shaab, un pueblo que ha sufrido grandes destrucciones desde el inicio de las hostilidades en octubre de 2023. Estos incidentes reflejan un preocupante patrón de violaciones al alto al fuego, con más de 33 muertes registradas solo en noviembre y más de 300 desde el año anterior.

En Gaza, la situación es igualmente alarmante. Un ataque israelí dejó 21 palestinos muertos el pasado sábado, mientras Israel alegaba que un combatiente de Hamas había cruzado la "línea amarilla" y abierto fuego contra sus tropas. Funcionarios de Hamas acusan a Israel de aprovechar incidentes aislados para desmantelar el alto al fuego y reanudar su ofensiva. La violencia continua evidencia cómo se desmoronan rápidamente los acuerdos diplomáticos cuando una parte actúa bajo lo que críticos describen como una mentalidad de "guerra perpetua".

Cálculos políticos detrás del conflicto

No se pueden ignorar los cálculos políticos que subyacen a esta escalada. Analistas señalan que mantener a Israel en un estado constante de guerra beneficia personalmente a Netanyahu al retrasar sus juicios por corrupción y satisfacer a sus socios del gobierno ultraderechista. Estos aliados consideran esto como una oportunidad histórica para avanzar hacia su visión de limpieza étnica en Palestina y redefinir los principios internos del gobierno israelí.

La comunidad internacional también tiene una responsabilidad significativa en este comportamiento permisivo. Con Estados Unidos proporcionando cobertura diplomática constante y financiamiento militar, Israel enfrenta pocas consecuencias por violar acuerdos de alto al fuego. Esta dinámica le permite actuar sin restricciones, conscientes de que la rendición de cuentas internacional es poco probable a pesar de las bien documentadas violaciones a los derechos humanos.

Consecuencias humanitarias del conflicto

El aumento reciente en los ataques revela un cálculo estratégico por parte del gobierno israelí. Con la atención mundial desviada hacia otras crisis globales, Netanyahu parece sentirse fortalecido para intensificar acciones militares que podrían atraer condenas internacionales más severas si se produjeran bajo circunstancias diferentes.

El costo humano sigue aumentando bajo esta retórica política. En Gaza, la reconstrucción se torna imposible debido a los bloqueos israelíes sobre la ayuda humanitaria y ataques dirigidos a infraestructuras esenciales. En Líbano, los civiles que intentan reconstruir sus vidas enfrentan constantes amenazas por ataques aéreos. Estas realidades ponen en evidencia la vacuidad de los acuerdos de alto al fuego cuando una parte mantiene dominancia militar sobre poblaciones civiles.

A medida que aumentan los ataques, persiste la pregunta fundamental: ¿continuará la comunidad internacional tolerando lo que numerosas organizaciones defensoras de derechos humanos han calificado como un sistema apartheid? Con Netanyahu presumiendo abiertamente sobre acciones militares independientes y el número creciente de víctimas civiles, el mundo enfrenta una prueba moral que ha fallado repetidamente. El patrón actual sugiere que sin abordar causas fundamentales como el apartheid israelí y la ocupación militar, estos ciclos destructivos continuarán indefinidamente.

Fuentes para este artículo incluyen:

TheCradle.co

TimesOfIsrael.com

AlJazeera.com

La noticia en cifras

Cifra Descripción
33 Número de personas muertas en noviembre debido a ataques israelíes.
300 Número total de muertes desde el año anterior debido al conflicto.
21 Número de palestinos muertos en un ataque israelí el sábado antes de la publicación de la noticia.

TEMAS RELACIONADOS:


Noticias relacionadas