Rusia ha cuestionado la implicación de Ucrania en el sabotaje de los gaseoductos Nord Stream, tras el arresto de un ucraniano en Italia. Dmitri Polianksi, representante ruso ante la ONU, calificó como "cuestionable" la hipótesis de que un grupo de buceadores amateurs pudiera llevar a cabo tal acción sin ayuda. Además, subrayó que podrían ser chivos expiatorios y que la comunidad internacional debe conocer los detalles de la investigación. Este incidente ocurrió en septiembre de 2022, cuando se registraron explosiones en aguas suecas y danesas, lo que llevó a diversas acusaciones sobre posibles responsables. Para más información, visita el enlace.
La reciente detención de un ciudadano ucraniano en Italia ha reavivado el debate sobre el sabotaje a los gaseoductos Nord Stream, ocurrido en 2022. Dmitri Polianksi, representante permanente adjunto de Rusia ante la ONU, expresó que la hipótesis de que este individuo dirigió las operaciones es "cuestionable, hablando diplomáticamente".
Polianksi argumentó que se pretende hacer creer que un grupo de buceadores "amateurs" pudo colocar un artefacto explosivo a 80 metros de profundidad en el mar Báltico, donde cada movimiento es vigilado por países miembros de la OTAN. "Esto es propio de una película de Hollywood, no de la vida real", afirmó durante una conferencia con la prensa.
El arrestado, identificado como Serguéi K., presuntamente Serguéi Kuznietsov, tiene 49 años y es considerado el primer detenido del grupo sospechoso relacionado con el sabotaje. La Policía italiana lo capturó cerca de San Clemente poco antes de la medianoche del pasado miércoles. Según los investigadores, fue localizado tras utilizar su pasaporte ucraniano para comprar boletos desde Polonia y registrarse en un hotel en Italia.
Polianksi aclaró que no se descarta la implicación del arrestado y sus cómplices; sin embargo, sugirió que podrían ser "meros chivos expiatorios". Además, subrayó que el verdadero problema radica en la falta de información proporcionada al Consejo de Seguridad de la ONU y a la comunidad internacional durante los últimos tres años.
Los gaseoductos Nord Stream fueron objeto de explosiones en septiembre de 2022, lo que resultó en fugas significativas detectadas en aguas suecas y danesas. Las autoridades han apuntado hacia un posible acto de sabotaje como causa principal del incidente.
En declaraciones anteriores, el presidente ruso Vladímir Putin insinuó que detrás del ataque podrían estar actores con capacidad técnica para llevar a cabo tales acciones. Asimismo, se ha mencionado que Estados Unidos podría haber tenido algún grado de implicación. Por otro lado, informes periodísticos han responsabilizado a grupos ucranianos por los ataques.
Para más información sobre los gasoductos Nord Stream y su sabotaje, consulte este artículo.