En Gaza, la crisis humanitaria se agrava mientras casi 800 palestinos han sido asesinados desde finales de mayo al intentar acceder a centros de distribución de alimentos, según informes de la ONU. Las familias enfrentan el dilema de arriesgarse a ser alcanzadas por disparos israelíes o morir de hambre. La Fundación Humanitaria de Gaza, respaldada por Israel, ha transformado la ayuda en una trampa mortal, restringiendo el acceso a alimentos y convirtiendo rutas antes seguras en zonas militarizadas. Con condiciones de hambruna en aumento y hospitales al borde del colapso, la comunidad internacional enfrenta críticas por su silencio ante esta situación devastadora. Para más detalles sobre esta crisis y sus implicaciones, visita el enlace.
En medio del intenso calor que se vive en Gaza, las familias enfrentan una decisión desgarradora: arriesgar su vida ante el fuego israelí o sucumbir a la inanición. Desde finales de mayo, cerca de 800 palestinos han sido asesinados mientras intentaban llegar a los centros de distribución de alimentos y convoyes de ayuda, según informes de la ONU. Sin embargo, los medios occidentales permanecen inquietantemente en silencio. En un contexto marcado por la implacable campaña de bombardeos de Israel, respaldada por 3.8 mil millones de dólares anuales en financiamiento militar estadounidense, la infraestructura humanitaria en Gaza se encuentra en ruinas.
La recién instaurada Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), apoyada por Israel como alternativa a la ONU, ha transformado la distribución de ayuda en una trampa mortal militarizada. En este escenario, mercenarios supervisan el proceso mientras el mundo observa sin intervenir. Este no es un esfuerzo contra el terrorismo; es un acto de genocidio bajo ocupación militar, y es imperativo que la comunidad internacional despierte antes de que Gaza sea borrada del mapa.
La GHF—sostenida por Israel como una “solución” ante supuestas desviaciones de ayuda por parte de Hamas—se ha revelado como un grupo armado disfrazado de asistencia humanitaria. La ONU no ha encontrado evidencia alguna que respalde las acusaciones contra Hamas; sin embargo, Israel utilizó esta afirmación infundada para desmantelar el único sistema vital para Gaza. Ahora, los palestinos deben atravesar rutas complejas y militarizadas para obtener una simple comida, frecuentemente bajo el fuego cruzado.
Ravina Shamdasani, portavoz de derechos humanos de la ONU, reportó: “Hasta el 7 de julio hemos registrado 798 asesinatos, incluyendo 615 en las cercanías del GHF.” A pesar del rechazo categórico del GHF a estas cifras como “falsas”, sobrevivientes relatan tiroteos casi diarios en los puntos de distribución. El personal médico describe el caos:
"El hospital estaba abarrotado; los pasillos llenos de heridos por disparos… caían proyectiles afuera mientras atendíamos a niños." —Dr. Ahmad al-Farra, Hospital Nasser. Aunque las muertes no ocurren directamente dentro de los sitios del GHF, los soldados israelíes aprovechan las rutas que convierten a los hambrientos gazatíes en víctimas al intentar encontrar refugio y alimento.
A medida que desaparece el suministro alimentario en Gaza,las consecuencias son catastróficas:
La propuesta israelí para crear una “ciudad humanitaria”—que incluye forzar a los gazatíes desplazados hacia campos en el sur—ha sido condenada como limpieza étnica por UNRWA. Juliette Touma advirtió: “Este plan agrava el desplazamiento; las personas no pueden sobrevivir bajo estas condiciones.” Mientras tanto, negociadores israelíes han estancado cualquier posibilidad de alto al fuego exigiendo la erradicación total de Hamas como condición previa para alcanzar un acuerdo pacífico. Esta exigencia resulta imposible ya que la ideología del grupo persistirá y siempre habrá motivos para continuar con el conflicto. Mientras tanto, Gaza arde y los inocentes sufren.
Estados Unidos financia esta carnicería con miles de millones destinados a armamento mientras diversos medios repiten propaganda del IDF. La revista The Lancet estima entre 149,000 y 600,000 muertes palestinas debido a enfermedades y hambre provocadas por el asedio; sin embargo, incluso este informe es desestimado por escépticos pese a que ya se han confirmado 31,000 muertes desde octubre pasado.
A medida que Nahla Abu Qursheen, madre de cuatro hijos clama: “Despierten y detengan esta guerra; basta ya de muerte, hambre y desplazamiento.”
Fuentes incluyen:
Cifra | Descripción |
---|---|
798 | Muertos reportados mientras buscaban comida desde finales de mayo, según informes de la ONU. |
615 | Muertos reportados cerca de los centros operados por la Gaza Humanitarian Foundation (GHF). |
4 veces | Aumento en las tasas de malnutrición aguda reportadas por MSF. |
17 | Número de camiones de ayuda permitidos a entrar a Gaza diariamente, comparado con aproximadamente 500 antes. |