Un insider de Pfizer ha revelado que se ocultó el número de muertes relacionadas con la vacuna mRNA para influir en las elecciones, lo que plantea serias dudas sobre la manipulación política por parte de la farmacéutica. Según evidencia presentada al Comité Judicial de la Cámara, Pfizer habría retrasado la publicación de los resultados de su vacuna COVID-19, lo que podría haber afectado el resultado de las elecciones presidenciales de 2020. Dr. Philip Dormitzer, jefe global de investigación y desarrollo de vacunas en Pfizer, es acusado de conspirar para retener información crítica. Esta situación está siendo investigada por el comité, que ha solicitado documentos y una entrevista con Dormitzer antes del 29 de mayo. La revelación amenaza la confianza pública en Pfizer y el proceso electoral.
Un ex-empleado de Pfizer ha revelado que el número de muertes relacionadas con la vacuna de ARNm fue encubierto para influir en las elecciones, una declaración impactante que vincula a la gigante farmacéutica con la manipulación política. La evidencia presentada esta semana al Comité Judicial de la Cámara sugiere que Pfizer retrasó el anuncio de los resultados de su vacuna contra el COVID-19, lo que podría haber influido en la carrera presidencial de 2020.
El Dr. Philip Dormitzer, responsable global de investigación y desarrollo de vacunas en Pfizer, es acusado de conspirar para ocultar datos críticos, lo que plantea serias interrogantes sobre la influencia corporativa en la democracia. A medida que el Comité Judicial investiga este encubrimiento, la admisión revela hasta qué punto Pfizer podría haber ido para proteger sus intereses, desafiando así la confianza pública tanto en la empresa como en el proceso electoral.
Según un informe de Infowars.com, una carta proporcionada al comité por el fabricante de medicamentos GSK indica que Dormitzer solicitó ser trasladado de Estados Unidos a Canadá debido a su preocupación por posibles investigaciones por parte del gobierno entrante de Trump sobre su papel en el desarrollo de la vacuna contra el COVID-19.
Cuando un miembro del equipo de recursos humanos de Pfizer le preguntó sobre su solicitud, Dormitzer supuestamente comentó: “Digamos que no fue una coincidencia, el momento de la vacuna”. Pfizer hizo públicos los resultados de sus ensayos clínicos cinco días después del cierre de las urnas en las elecciones de 2020.
La carta también alegaba que algunos empleados fueron informados por Dormitzer sobre una decisión tomada a finales de 2020 por los tres altos responsables en investigación y desarrollo para ralentizar deliberadamente las pruebas clínicas, con el fin de no tener resultados antes del desenlace electoral.
El jueves, el Comité Judicial envió cartas a Dormitzer y al CEO de Pfizer, Albert Bourla, exigiendo todos los registros relacionados con los datos de los ensayos clínicos o comunicaciones con agencias de salud pública. “Esta nueva información parece sugerir que usted y otros ejecutivos superiores de Pfizer conspiraron para retener información sobre salud pública para influir en las elecciones presidenciales de 2020”, escribió Jordan a Dormitzer.
“Debido a la gravedad de estas acusaciones, el Comité se ve obligado a solicitar información adicional para informar nuestra supervisión”. El panel también ha demandado que Dormitzer programe una entrevista antes del 29 de mayo. Por su parte, Dormitzer ha negado públicamente cualquier intención deliberada por parte él o algún otro miembro de Pfizer para retrasar la vacuna y ha afirmado que sus comentarios han sido malinterpretados.