CLAVES

La prensa española, pendiente del nuevo periódico digital de Pedro J. Ramírez

Joaquín_ABAD | Lunes 31 de agosto de 2015
El periódico “El Español”, probablemente el primer proyecto nativo digital que nacerá con fuertes recursos económicos y una amplia redacción dirigida por el periodista Pedro J. Ramírez, es esperado con expectación por el mundo editorial que observa cómo agonizan los dinosaurios del papel impreso.

Con un capital de 10 millones de euros y un equipo profesional formado por 70 periodistas, más de 30 técnicos, diseñadores y administrativos, el nuevo periódico digital del fundador y ex director de “El Mundo” estará en la red a primeros de octubre, asegura Pedro J. Ramírez.

La empresa editora NoHaceFaltaPapel, S.A. pretende hacer rentable el diario digital en tres años y sin recurrir, como la prensa de papel, a subvenciones en forma de publicidad institucional.

Pedro J. trata de hacer, sin inventar nada, un periódico digital a lo grande. Un diario on-line que tendrá una parte en abierto y otra que llegará sólo a los suscriptores. Es la tendencia que se está imponiendo con experiencias similares en algunos diarios británicos como “The Economist” y “The Financial Times”, y otros norteamericanos.

Periódicos en quiebra técnica


Los dinosaurios del papel en España prosiguen su lenta agonía: El Grupo Prisa, antaño líder de los medios impresos, declara pérdidas históricas de 2.263 millones de euros en 2014 y su buque insignia, “El País” pierde 26 millones.

Al igual que otro dinosaurio de la distribución como El Corte Inglés, Qatar ha entrado en el capital de Prisa que se vio obligado a realizar una ampliación de 75 millones suscrita en su totalidad por International Media Group, del sultán qatarí Ghanim Alhodaifi Al-Kuwari.
En breve comenzarán a desaparecer los periódicos de papel ante unos costes insostenibles
En su momento, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, obligó a los bancos a que convirtieran en acciones la deuda de Prisa, por lo que Santander, Bilbao y Caixa también son copropietarios del rotativo fundado en 1976 por Jesús Polanco y Juan Luis Cebrián.

Desde hace meses, el nuevo director de la cabecera, el periodista Antonio Caño, está volcado en rentabilizar la edición digital para en su momento cerrar la edición impresa, que es la que le está produciendo pérdidas ante la continua caída de ventas y de publicidad.

Otro tanto ocurre en “El Mundo”, fundado por Pedro J. Ramírez, cuya empresa editora Unidad Editorial declara unas pérdidas de 20 millones de euros, que está soportando la matriz italiana. El nuevo director, David Jiménez, también se ha centrado en la edición digital para dejar la impresa en el momento que alguno de los grandes periódicos dé el primer paso.

Con los ingresos de Orbit (edición digital de pago) y la publicidad on-line podría enjugar las pérdidas que fueron el detonante para que la empresa dejara caer a Pedro J. Ramírez. Perdiendo dinero, las presiones de la Moncloa cayeron en campo abonado. El PP sufría un constante deterioro por las informaciones que el periódico publicaba sobre las diferentes tramas de corrupción.

El grupo vasco Vocento, editor del periódico “ABC” decano de la prensa española, tampoco sabe cómo salir del agujero: 173 millones de pérdidas acumuladas por el rotativo fundado por la familia Luca de Tena en 1903.

“ABC” ha sobrevivido a continuos cambios en el modelo periodístico, pero a fecha de hoy sus lectores tradicionales desaparecen y sus ventas apenas llegan a 70.000 ejemplares diarios. La versión impresa, sin gancho ni liderazgo, no parece que pueda seguir soportando por mucho más tiempo los costes actuales.

Sostenidos por el “maná oficial”


Los rotativos madrileños, en su totalidad, están sostenidos por la publicidad institucional ordenada por Moncloa. A cambio del “maná oficial”, la vicepresidenta Sáenz de Santamaría cesa directores e impone líneas editoriales amables con el poder. Una situación que ha abocado a los diarios a perder credibilidad y que sus cifras de difusión se encuentren en caída libre.
Moncloa cesa directores e impone líneas editoriales con el arma de la publicidad institucional
En Cataluña el panorama es similar. La totalidad de los periódicos de esa comunidad autónoma, sobre todo “La Vanguardia” y “El Periódico”, se mantienen a pesar de su escasa circulación gracias a las ingentes cantidades de publicidad institucional que se reparten desde el Palau de la Plaza de San Jaime.

Independencia económica


La libertad de prensa sólo es posible si las empresas editoras son independientes económicamente. Desde finales del pasado siglo la difusión de la prensa escrita comenzó a caer a medida que internet se extendía con tarifas cada vez más baratas, al tiempo que los medios de papel incrementaban el precio de sus cabeceras.

Periódicos digitales independientes e innovadores apoyados en las redes sociales comienzan a perfilarse como un nuevo modelo de negocio editorial.

Hasta la fecha los digitales puros, salvo excepciones, no han iniciado su andadura con grandes capitales. Por el contrario, han sido proyectos voluntaristas que con el tiempo han creado su hueco e influencia. Ahora la gran pregunta de los empresarios es en qué medida Pedro J. Ramírez revolucionará la prensa digital con “El Español” como en su momento revolucionó el papel con “El Mundo”.

Noticias relacionadas