Australia ha revocado la visa de Matthew Gruter, un sudafricano que asistió a un rally neo-nazi en el parlamento de Nueva Gales del Sur. Gruter, quien vive en Australia desde 2022 y es miembro del grupo extremista National Socialist Network, participó en una protesta anti-judía donde se exhibieron lemas de odio. El Ministro de Asuntos Internos, Tony Burke, afirmó que los visitantes deben respetar las normas del país y que aquellos que promueven el odio pueden ser expulsados. Este evento refleja un aumento en el extremismo de derecha en Australia, donde se han tomado medidas más estrictas contra tales comportamientos.
Un hombre sudafricano ha visto revocada su visa tras ser identificado en un rally neo-nazi frente al parlamento estatal de Australia. Matthew Gruter, quien reside en el país desde 2022, participó en una protesta anti-judía organizada por la National Socialist Network a principios de este mes.
Durante el evento, Gruter fue observado entre aproximadamente 60 hombres vestidos de negro que sostenían un cartel con la frase «Abolir el lobby judío», según reportes de medios australianos.
Australia ha experimentado un aumento reciente del extremismo de derecha. En respuesta a esta situación, el gobierno australiano implementó medidas que penalizan con prisión obligatoria el saludo nazi a principios de este año.
El Ministro de Asuntos Internos de Australia, Tony Burke, confirmó la cancelación de la visa de Gruter, afirmando: «Si estás con una visa, eres un invitado. Si eres ciudadano, eres un miembro pleno de la familia australiana. Como en cualquier hogar, si un invitado llega para mostrar odio y alterar el ambiente familiar, se le puede indicar que es hora de regresar a casa».
Gruter se trasladó a Australia junto a su esposa y trabaja como ingeniero civil, según reporta ABC News. La National Socialist Network, responsable del rally realizado el 8 de noviembre, es conocida como un grupo neo-nazi prominente en Australia. Se informa que Gruter ocupa una posición destacada dentro del grupo en Nueva Gales del Sur.
Los manifestantes corearon repetidamente «sangre y honor», un lema asociado con la Juventud Hitleriana, conforme a lo indicado por ABC News. El Premier de Nueva Gales del Sur, Chris Minns, calificó la manifestación, que duró cerca de 20 minutos, como una «impactante exhibición de odio, racismo y antisemitismo».
Sarah Schwartz, directora ejecutiva del Consejo Judío de Australia, expresó a ABC News que los grupos neo-nazis representan una amenaza para el multiculturalismo en el país y subrayó la necesidad de distinguir entre protestas pacíficas y «actos odiosos». Schwartz agregó: «Son actos de discurso de odio y deben ser considerados como tales».