La Corte Suprema de EE. UU. ha respaldado al presidente Trump en una decisión de 6-3 que le permite retener $4 mil millones en ayuda exterior, anulando una orden de un tribunal inferior y reafirmando la autoridad ejecutiva sobre el gasto. Los jueces Kagan, Sotomayor y Jackson disienten, argumentando que la decisión socava los controles y equilibrios, permitiendo la retención indefinida de fondos sin aprobación del Congreso. Críticos advierten que esta medida podría provocar crisis humanitarias en naciones dependientes de la ayuda. La decisión fortalece el legado de Trump y refleja el apoyo del Tribunal Supremo a sus políticas conservadoras.
La Corte Suprema de los Estados Unidos ha emitido un fallo a favor del presidente Donald Trump en una decisión de 6-3 que le permite retener cuatro mil millones de dólares en ayuda extranjera. Esta resolución revoca una orden de un tribunal inferior y refuerza la autoridad ejecutiva sobre el gasto público.
Los magistrados Elena Kagan, Sonia Sotomayor y Ketanji Brown Jackson expresaron su desacuerdo, argumentando que la decisión socava los mecanismos de control y equilibrio del poder, permitiendo la retención indefinida de fondos sin la aprobación del Congreso. Los críticos sostienen que el congelamiento de la ayuda por parte de Trump explota la Ley de Control de Impoundment, eludiendo al Congreso y poniendo en riesgo a naciones dependientes de esta asistencia humanitaria.
A medida que organizaciones internacionales advierten sobre el colapso de programas vitales, este fallo no solo fortalece el legado de Trump, sino que también se alinea con el apoyo más amplio del tribunal supremo, dominado por jueces conservadores, hacia sus políticas.
El alto tribunal determinó que Trump puede retener cuatro mil millones de dólares en ayuda extranjera aprobada por el Congreso, lo que representa una victoria significativa para su administración en la prolongada batalla por la autoridad ejecutiva. La decisión fue anunciada el 26 de septiembre y revoca una orden previa emitida por el juez Amir Ali del Tribunal del Distrito de Columbia.
El juez Ali había bloqueado previamente el congelamiento impuesto por Trump a la extinta Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y otros programas globales, calificándolo como "probablemente ilegal". Este conflicto legal se originó a raíz de una orden ejecutiva del año anterior que suspendía la mayoría de las subvenciones extranjeras durante 90 días, citando gastos excesivos y una falta de alineación con su agenda "América Primero". El secretario de Estado Marco Rubio siguió con directrices que pausaban miles de millones destinados a salud global y programas de desarrollo.
Organizaciones sin fines de lucro y grupos defensores interpusieron demandas argumentando que este congelamiento violaba las leyes federales sobre apropiaciones y perjudicaba a poblaciones vulnerables. El juez Ali coincidió con estos argumentos y ordenó a la administración liberar los fondos antes del cierre del año fiscal en septiembre; un plazo que ahora queda anulado tras la intervención del tribunal supremo.
Los tres magistrados disidentes advirtieron que esta decisión permite a la administración "impedir que los fondos lleguen a sus destinatarios previstos – no solo ahora, sino para siempre", ya que las asignaciones restantes caducarán sin ser utilizadas. Kagan criticó al tribunal por acelerar el caso sin un análisis completo, argumentando que esto representa una erosión peligrosa del sistema de controles y equilibrios.
Los detractores consideran que este fallo consolida una táctica controvertida utilizada durante la era Trump: el "rescate en bolsillo", un mecanismo presupuestario poco común donde los presidentes retienen fondos mediante recortes tardíos en el gasto que el Congreso no puede revertir efectivamente. La administración defiende esta autoridad bajo la Ley de Control de Impoundment, aunque opositores señalan que dicha ley fue diseñada para limitar las impugnaciones presidenciales, no para habilitarlas.
A medida que se cierra el año fiscal, esta decisión deja miles de millones en ayuda en un estado incierto. La administración ha prometido gastar seis mil quinientos millones de dólares de los fondos congelados pero no ha proporcionado claridad sobre los cuatro mil millones restantes. Para los defensores de la salud global y las naciones en desarrollo dependientes de la asistencia estadounidense, las consecuencias humanas son inmediatas. Sin embargo, para la administración Trump, este fallo se alinea con su objetivo primordial: priorizar los intereses estadounidenses.
Cifra | Descripción |
---|---|
$4 mil millones | Monto de la ayuda extranjera que Trump puede retener. |
6-3 | Resultado de la decisión del Tribunal Supremo. |
90 días | Duración inicial del congelamiento de la ayuda extranjera según el decreto ejecutivo de Trump. |
$5 mil millones | Monto que la administración Trump busca recortar en ayuda este año. |