Un colaborador de Kiev fue detenido por el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) mientras intentaba colocar una bomba en el coche de un funcionario de la administración de Jersón. El sospechoso, un ciudadano ruso nacido en 1974, había sido reclutado por los servicios especiales ucranianos para llevar a cabo el atentado. Durante su arresto, se le incautó un artefacto explosivo casero, incluyendo C-4 y un detonador eléctrico. Se han abierto causas penales por intento de atentado terrorista y manejo ilegal de explosivos. Para más detalles, visita el enlace.
El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) ha informado sobre la detención de un individuo que intentó llevar a cabo un atentado contra un funcionario de la administración de la provincia rusa de Jersón. Según el comunicado emitido el lunes, se logró prevenir este acto terrorista gracias a la intervención oportuna del organismo.
El FSB detalló que se trataba de un ciudadano ruso, nacido en 1974, quien había sido reclutado por los servicios especiales ucranianos con el propósito de cometer un acto terrorista dirigido hacia representantes del gobierno regional. Este hecho pone de manifiesto las tensiones actuales entre Rusia y Ucrania, así como las acciones que se están llevando a cabo en el contexto del conflicto.
De acuerdo con la información proporcionada por el FSB, el sospechoso había recibido instrucciones específicas de un agente ucraniano para apoderarse de un artefacto explosivo casero. Durante su detención, se le confiscó una sustancia explosiva extranjera conocida como C-4, con un peso total de 1.250 gramos, además de un detonador eléctrico y una unidad de control programable.
Las autoridades han iniciado investigaciones penales por intento de atentado terrorista y manejo ilegal de explosivos. El detenido ha admitido su culpabilidad en los hechos y actualmente se está trabajando en la identificación de posibles cómplices que hayan colaborado con él en este plan criminal.