La presidenta del Tribunal Supremo (TS) y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Isabel Perelló, destacó la necesidad de proteger la independencia judicial durante la inauguración de las XVIII Jornadas Jurídicas de Sarria. En su discurso, subrayó que la separación de poderes es fundamental para un Estado de Derecho y advirtió sobre los daños que causan las críticas injustificadas a la justicia. Las jornadas, que se celebran hasta el viernes, reúnen a expertos en derecho para discutir la reforma judicial en el contexto actual. La clausura estará a cargo de Cándido Conde-Pumpido, presidente del Tribunal Constitucional. Para más detalles, visita el enlace.
Isabel Perelló, presidenta del Tribunal Supremo (TS) y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), inauguró las XVIII Jornadas Jurídicas de Sarria ‘Román García Varela’. Este evento, que se extenderá hasta el viernes, reúne a expertos que discutirán la reforma de la Justicia en el contexto de la sociedad contemporánea. Durante su discurso, Perelló subrayó que la independencia judicial es un tema “primordial” y enfatizó la necesidad de salvaguardarla frente a posibles injerencias, independientemente de su origen. “Solo un Estado con una separación de poderes completamente garantizada puede considerarse un Estado de Derecho”, afirmó.
En su intervención, Perelló advirtió sobre el impacto negativo de las “descalificaciones injustificadas” hacia la independencia judicial, que pueden causar un “grave daño tanto a la Justicia como a la propia sociedad”. La presidenta defendió la profesionalidad de los jueces y magistrados españoles, quienes también son jueces europeos, destacando que aunque las críticas son bienvenidas para mejorar, no deben cuestionar su integridad. Asimismo, recordó que “ningún poder del Estado puede dar instrucciones a los jueces sobre cómo interpretar y aplicar el ordenamiento jurídico”, rechazando así los ataques desmedidos hacia las decisiones judiciales.
El acto inaugural tuvo lugar en la Casa de la Cultura de Sarria y contó con la presencia de figuras relevantes como José María Gómez y Díaz-Castroverde, presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia; Claudio Garrido, alcalde de Sarria; Diego Calvo, conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes; Pablo Rivera, diputado del Área de Promoción Económica y Social de la Deputación de Lugo; y Ana Traseira, directora de la UNED de Lugo. Posteriormente, Francisco Marín Castán, expresidente del Tribunal Supremo (e.f.), ofreció una conferencia inaugural.
La primera mesa redonda del encuentro fue moderada por Pascual Sala, expresidente del Tribunal Constitucional. En esta sesión se abordaron temas cruciales como la división de poderes y el Estado de Derecho, así como los juicios por responsabilidad política y penal. Estas jornadas tienen sus raíces en 2007 y continúan celebrándose anualmente en memoria del magistrado Román García-Varela Iglesias tras su fallecimiento en 2013.
Aproximadamente una treintena de jueces y juezas, junto con expertos en Derecho y personal vinculado a la Administración de Justicia, participan en estas jornadas organizadas por el Ayuntamiento de Sarria. Además, forman parte del programa de Formación Continua del CGPJ. Las sesiones están disponibles para seguimiento telemático desde el centro de Lugo de la UNED. El evento será clausurado por Cándido Conde-Pumpido, presidente del Tribunal Constitucional.
La presidenta del Tribunal Supremo (TS) y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Isabel Perelló, inauguró las jornadas.
El tema principal es la reforma de la Justicia ante la sociedad del siglo XXI, con un enfoque en la independencia judicial.
Isabel Perelló advirtió sobre la importancia de salvaguardar la independencia judicial frente a posibles injerencias y mencionó que las descalificaciones injustificadas pueden causar un grave daño a la Justicia y a la sociedad.
En la primera mesa redonda se profundizó en temas como la división de poderes, el Estado de Derecho, los juicios de responsabilidad política y penal, así como los retos de la reforma judicial.
El encuentro será clausurado por Cándido Conde-Pumpido, presidente del Tribunal Constitucional.