El presidente Donald Trump ha prohibido la investigación de ganancia de función, conocida como "experimentos de Frankenvirus", con fondos públicos en EE. UU., tras más de cinco años desde el inicio de la pandemia de COVID-19. Esta decisión, que busca prevenir incidentes relacionados con laboratorios, termina con el financiamiento federal para tales investigaciones y señala directamente al Dr. Anthony Fauci por su papel en la promoción de estos estudios controvertidos. La orden ejecutiva también suspende toda investigación sobre patógenos hasta que se desarrollen nuevas políticas de seguridad, reflejando preocupaciones crecientes sobre la supervisión y regulación de la investigación virológica de alto riesgo.
El gobierno de Estados Unidos ha decidido poner fin a la financiación de experimentos de “Frankenvirus” en laboratorios biológicos secretos ubicados en diversas partes del mundo. El presidente Donald Trump ha tomado medidas drásticas contra esta industria, promovida por el Dr. Anthony Fauci, y ha emitido una prohibición inmediata sobre la investigación de ganancia de función.
Más de cinco años después de que el COVID-19 se propagara a nivel mundial, el presidente Trump firmó un decreto ejecutivo histórico que prohíbe toda financiación federal para la investigación de virus con ganancia de función. En este contexto, mencionó directamente al Dr. Fauci por su papel en la promoción y financiamiento de estos experimentos controvertidos, que muchos consideran responsables del inicio de la pandemia.
Este decreto pone fin inmediatamente a la financiación actual y futura para dicha investigación y subraya que esta acción busca prevenir incidentes relacionados con laboratorios. Se hace referencia a proyectos polémicos como los llevados a cabo por EcoHealth Alliance y el Instituto de Virología de Wuhan, considerados operaciones ilegales y contribuyentes a la crisis sanitaria global.
Además, el decreto ejecutivo suspende todas las investigaciones sobre patógenos hasta que se desarrollen nuevas políticas de seguridad. Mientras algunos científicos, incluido el exdirector del CDC, Dr. Robert Redfield, apoyan la teoría del escape del laboratorio, el Dr. Fauci continúa defendiendo su inocencia, afirmando que el virus surgió naturalmente en un mercado húmedo en Wuhan, muy cerca del lugar donde se realizaban sus arriesgadas investigaciones.
La posición cada vez más precaria del Dr. Fauci se ve debilitada por su historial de declaraciones previas en las que “predijo” que una pandemia “sorpresa” ocurriría durante la primera administración Trump.
Este decreto representa un cambio importante en la política estadounidense respecto a la financiación de investigaciones virológicas de alto riesgo, reflejando las crecientes preocupaciones sobre el potencial de incidentes relacionados con laboratorios y la necesidad de una supervisión más estricta.
Críticos han cuestionado durante mucho tiempo la financiación y supervisión estadounidense sobre investigaciones realizadas en el extranjero. Un informe del Departamento de Defensa reveló importantes deficiencias en el seguimiento de actividades y gastos relacionados con ganancia de función.
El secretario Robert F. Kennedy Jr. y otros funcionarios han elogiado esta decisión como un paso crucial para prevenir futuras pandemias. La Casa Blanca enfatizó que este orden tiene como objetivo proteger a los ciudadanos estadounidenses de investigaciones peligrosas que manipulan virus y otros agentes biológicos, sin obstaculizar investigaciones biológicas productivas necesarias para mantener la preparación ante amenazas biológicas y continuar liderando globalmente en biotecnología y bioseguridad.